viernes, 27 de junio de 2008

Capítulo 4. La Misión en Pablo: una invitación a unirse a la comunidad escatológica

Fecha: 27 de junio de 2008.
Materia: NATURALEZA Y MISIÓN DE LA IGLESIA II

Maestro: Pastor Rafael Pola Baca
Alumno: Agustín Alberto Ceballos Hernández

Misión en Transformación. David J. Bosch
Capítulo 4. La Misión en Pablo:

una Invitación a unirse a la Comunidad Escatológica

PRIMER MISIONERO Y PRIMER TEÓLOGO
El interés de muchos misionólogos ha estado centrado en los métodos misioneros de Pablo, y las lecciones que de ellos se pueden extraer. Este no es el enfoque primordial en este capítulo.
Además, este capítulo se concentrará casi exclusivamente en las cartas paulinas sin entrar en el análisis de Hechos, debido a que Hechos sigue siendo una fuente secundaria respecto a Pablo. Se analizarán únicamente las cartas consideradas indiscutiblemente paulinas por la mayoría de los expertos: Romanos, 1 y 2 Corintios, Gálatas, Filipenses, 1 Tesalonicenses y Filemón. Todas estas cartas se escribieron durante los años de servicio misionero activo de Pablo después de salir de Antioquia, un período de siete u ocho años que va aproximadamente del 49 al 56 d.C. Esto significa que Pablo escribió sus cartas quince o veinte años antes que Marcos escribiera su Evangelio, y treinta o más antes que Mateo y Lucas escribieran los suyos.
Solo de manera gradual los investigadores se han dado cuenta de que a Pablo se le tiene que entender, ante todo, como un misionero apostólico también en sus cartas. Todas las cartas de Pablo, según Paul Wernle, dan una sola respuesta al interrogante de quién era y quién quería ser Pablo: un apóstol de Jesucristo, un misionero. “El sabía... que Dios lo había enviado al mundo para proclamar el evangelio, no para contemplar y especular”.
Hoy día se acepta que Pablo fue el primer teólogo cristiano precisamente porque fue el primer misionero, y que su “teología de la misión es prácticamente un sinónimo de las impresionantes reflexiones paulinas sobre la vida cristiana” (Senior y Stuhlmueller 1985) y “coincide prácticamente con toda su concepción cristiana”, de modo que “algo anda mal si se hace una distinción entre la misión de Pablo y su teología” (Dal 1977; Hahn 1965). Su teología es una teología misionera, y la misión se relaciona integralmente con su identidad y pensamiento como tal. La comprensión de la misión de Pablo es “un análisis de la realidad desencadenado por una experiencia inicial que proporcionó a san Pablo una nueva visión del mundo” (Senior y Stuhlmueller 1985).

PABLO: SU CONVERSIÓN Y LLAMADO
¿Qué fue lo que convirtió a un perseguidor del movimiento cristiano en su mayor protagonista, abrazándolo como el centro de su vida y aun del universo? Fue su encuentro con el Cristo resucitado.
Algunos eruditos argumentan a favor de dejar de lado la palabra “conversión” para describir la experiencia de Pablo por dos razones:
Una conversión implica un cambio de religión, y Pablo nunca cambio la suya.
No es justificable caracterizar a Pablo como una persona atormentada y llena de culpa por sus pecados, lo que provocó su conversión. El fenómeno de la “conciencia introspectiva” es típicamente occidental. Una experiencia así no era del interés de Pablo, quién tampoco esperaba encontrarla como respuesta en las personas a quienes les proclamaba el evangelio.

Se sugiere hablar de “llamado”, en lugar de “conversión” de Pablo. El mismo Pablo habla teológicamente de recibir el llamado a ser el apóstol a los gentiles, aludiendo sin duda a los llamados de Isaías y Jeremías a ser profetas. Como en el caso de ellos, su vocación parte de un acto decisivo de Dios, comunicado a través de una revelación y una visión (Gá 1:15).
Sin embargo Gaventa distingue:
· Alternación. Una forma limitada de cambio que se desarrolla sobre la base del pasado del individuo.
· Transformación. Un cambio de perspectiva radical que no exige un rechazo o negación del pasado o de valores previos, pero si una nueva percepción, una reinterpretación del pasado.
· Conversión. Un cambio en el cual ocurre una ruptura entre pasado y presente, de tal manera que el pasado se concibe en términos relativamente negativos.

Stendahl parece considerar lo ocurrido a Pablo en términos de una alternación. Pablo sigue básicamente en continuidad con su pasado, al cual se añade un llamado a la misión gentil.
Sin embargo lo que Pablo mismo describe en Gálatas 1:11-17 no parece adaptarse a dicha categoría. Pablo experimentó un cambio radical de valores, de definición propia y de compromiso, y es preferible usar el término “conversión” o por lo menos “transformación” para describir su experiencia. Fue una experiencia primordial que Pablo percibió como paradigmática para cada cristiano. El que quiere seguir a Cristo tiene que morir a la ley, entre otras cosas, lo cual significa abandonar o renunciar a algo, y esto sí es lenguaje de conversión.
El hecho de que Jesús fuera el Mesías podía significar una sola cosa para un judío: el comienzo del fin de la historia. Así lo entiende Pablo al percibir que había llegado la hora de pregonar la salvación en Cristo al mundo gentil. Según su propio testimonio coinciden su conversión y su llamado a los gentiles. Dios, dice Pablo, “tuvo a bien revelarme a su Hijo para que yo lo predicara entre los gentiles” (Gá. 1:15,16).
De la misma comunidad que había perseguido, Pablo heredó el evangelio que habría de proclamar.
Es posible que Pablo abrazara el significado pleno de su llamado sólo paulatinamente. La etapa más vital de su misión a los gentiles empezó realmente algunos años después de su experiencia en el camino a Damasco.
Asimismo Pablo demuestra claramente su deseo apasionado de mantenerse en plena comunión con la iglesia de Jerusalén, particularmente con los tres “columnas” (Jacobo, Cefas y Juan) que la representan. Expuso su evangelio a “los que eran reconocidos como dirigentes”, para “que todo su esfuerzo no fuera en vano” (Gá.2:2) y no poner en riesgo el éxito de su trabajo entre los gentiles, y para mantener la unidad indestructible de una iglesia compuesta por judíos y gentiles.
Pero Pablo no está interesado en la unidad como un fin en sí, ni a cualquier costo, pues está dispuesto a expresar su desacuerdo con Pedro por su “comportamiento condenable”, o a pronunciar una maldición sobre los judaizantes en Galacia (Gá. 1:7-9) o sobre el “otro evangelio” en Corinto (2 Co. 11:4), aún cuando tales acciones puedan comprometer la unidad de la iglesia.
Pablo a su vez, defiende apasionadamente su apostolado, a la par con cualquiera de los que habían caminado al lado de Jesús. Su apostolado no se origina en la tradición, sino en un encuentro con el Señor resucitado, quién lo comisionó como su embajador y representante.
Al contrario de lo que sucede con los otros apóstoles, para Pablo “las palabras “evangelio” y “apóstol” son conceptos correlativos, siendo ambos términos misioneros”.
Por eso en Pablo encontramos la visión misionera más sistemática y profunda elaborada en un marco cristiano y universal.

LA ESTRATEGIA MISIONERA DE PABLO
Misión a las metrópolis
En las primeras décadas del movimiento cristiano existían tres tipos de iniciativas misioneras:
1) Los predicadores itinerantes.
2) Los cristianos judíos de habla griega que emprendieron una misión a los gentiles, primero desde Jerusalén y luego desde Antioquia.
3) Los misioneros cristianos judaizantes, quiénes según 2 Cor. y Gálatas, frecuentaban iglesias cristianas existentes con el fin de “corregir” las “falsas” interpretaciones del evangelio.

Para su plan misionero, Pablo incorpora elementos de los primeros dos tipos mencionados, implementándoles modificaciones. Su concepción de la misión se encuentra expresada en Romanos 15:15-21.
Pablo estaba involucrado en la Zentrumsmission, es decir, una misión con base en ciertos centros estratégicos.
Pablo concentra sus esfuerzos en las capitales de distritos o provincias , cada una de las cuales representa una región entera: Filipos por Macedonia, Tesalónica por Macedonia y Acaya, Corinto por Acaya, y Efeso por Asia.
Estas “metrópolis” eran los centros principales de comunicación, cultura, comercio, política y religión. Pablo piensa regionalmente, no étnicamente. En estas ciudades Pablo echa el fundamento para construir una comunidad cristiana, con la esperanza de ver el evangelio esparcido a los pueblos y campos aledaños.
La visión de Pablo es global en términos del mundo conocido por él. Pablo está en el proceso de fundar iglesias, a las cuales busca nutrir a través de ocasionales visitas pastorales y largas cartas, y enviándoles sus colaboradores. Intercede a favor de sus congregaciones y les aconseja respecto a una gran variedad de asuntos bien prácticos y terrenales; espera que crezcan en madurez espiritual y mayordomía, y que lleguen a ser faros en su medio ambiente. Todo esto se va dando en el marco de una ferviente expectativa escatológica. No hay conflicto entre apostolado y Apocalipsis en Pablo, sino solamente una tensión creativa. Fervor apocalíptico y estrategia misionera van asidos de la mano.

Pablo y sus colegas
Ollrog distingue tres categorías de asociados:
1. El círculo más íntimo, incluyendo a Bernabé, Silvano y especialmente Timoteo.
2. Los compañeros de trabajo independientes, como Priscila, Aquila y Tito.
3. Los representantes de iglesias locales, como Epafrodito, Epafras, Aristarco, Gayo y Jasón.

Las iglesias ponen a estas personas a disposición de Pablo por períodos limitados; así las iglesias tienen una representación en la misión paulina y llegan a ser corresponsables de la obra. Cuando varios miembros de una comunidad son elegidos para esa tarea, ponen su carisma a disposición de la misión durante un período determinado. Este ministerio demuestra que las iglesias han alcanzado su mayoría de edad. Pablo concibe su misión siempre en función de la iglesia.

La conciencia apostólica de Pablo
Es de especial importancia la conciencia apostólica que Pablo tiene de sí mismo, y la manera en que se presenta como un modelo a ser imitado por todo cristiano. Como en el caso de los filósofos serios, no hay contradicción alguna entre su vida y lo que predica: su vida autentica su evangelio.
La confianza de Pablo en ofrecerse a sí mismo como arquetipo no reside ni en su ser ni en sus logros; más bien, se refiere continuamente a la iniciativa y el poder de Dios en su vida. La actitud de Pablo no se fundamenta, como en el caso de los filósofos, en una libertad moral lograda a través de la razón y el ejercicio de la voluntad; más bien, es dádiva de Dios. Está convencido de que, a través de su vida y ministerio, Dios está llamando a personas al Reino divino y a su gloria.
La obediencia incondicional exigida por Pablo y la autoridad a la cual apela no apuntan a él sino al evangelio, es decir, a Cristo. Y las demandas que pone sobre sí mismo van más allá de lo que exige de otros. Un imperativo pesa sobre sus hombros: “¡ay de mí si no predico el evangelio!” (1 Co. 9:16).

LA MOTIVACIÓN MISIONERA DE PABLO
Michael Green sugiere tres motivos misioneros principales en la Iglesia primitiva, visibles en Pablo: un sentido de gratitud, un sentido de responsabilidad y un sentido de preocupación.

Un sentido de preocupación
Lo más reprensible para Pablo es la idolatría. Los ídolos toman control de individuos, quienes se dejan arrastrar ciegamente, siendo esclavos de dioses que en realidad no los son, sometidos a esos débiles y pobres poderes. La esclavitud del gentil a los ídolos, no se debe a su ignorancia sino a su obstinación
En contraposición a la idolatría, Pablo proclama el mensaje de un solo Dios que exige lealtad absoluta del individuo. Dios es vivo y verdadero, y se reveló a sí mismo a nosotros a través de su Hijo.
Aquí es donde entra la preocupación de Pablo. El percibe a la humanidad sin Cristo como totalmente extraviada, en camino a la perdición, en urgente necesidad de la salvación. La idea del juicio inminente sobre los que “no obedecen la verdad” es un tema reiterativo en Pablo. Por eso no descansa. Pablo es embajador de Cristo; Dios apela a los perdidos a través del apóstol y sus colaboradores.
Pero el castigo de Dios es el oscuro contraste del mensaje positivo que él proclama: la salvación en Cristo y el inminente triunfo de Dios. El propósito de la misión de Pablo, entonces, es llevar a las personas a la salvación en Cristo. Con esto, Pablo está preparando al mundo para la gloria venidera de Dios y para el día cuando todo el universo lo adorará.

Un sentido de responsabilidad
Pablo es deudor a Cristo, lo cual se traduce en una deuda a quienes Cristo quiere traer a la salvación. La obligación ante quien murió produce una obligación ante aquellos por quienes murió. El creyente tiene una deuda tan grande con los no creyentes como su deuda con Cristo.
La manera de predicar el evangelio que tiene Pablo se da en un marco de flexibilidad, sensibilidad y empatía. Pero la libertad de su servicio no es opción suya: es cuestión de obediencia al evangelio, en tal grado que su propia salvación está en juego. En esencia Pablo afirma dos cosas: el evangelio de Jesucristo es para todos, sin distinción; y él, Pablo, está bajo obligación de tratar de “ganar” a tantos como sea posible.
Pablo enfatiza el hecho de que sus lectores son una comunidad de un género especial, con un sentido de pertenencia, con cohesión interna y solidaridad de grupo, y con un sentido de separación, distinguiéndose de los que no pertenecen a la comunidad. Los cristianos deben comportarse de una manera ejemplar porque son “santos”, “elegidos” de Dios, “llamados” y “conocidos” por Dios. Pero Pablo dice que se requiere también de este comportamiento ejemplar a causa del testimonio cristiano ante los de afuera.
Los cristianos no deben poner en riesgo sus relaciones con los de afuera, viviendo vidas irresponsables y desordenadas. Los cristianos, además, han de amar a todos. Su estilo de vida debe ser atractivo, atrayendo a los de afuera e invitándolos a unirse a la comunidad. Debe ser un estilo de vida misionero.

Un sentido de gratitud
Pablo va hasta los confines de la tierra debido a la experiencia abrumadora del amor de Dios que ha recibido por medio de Jesucristo. Para Pablo la razón más elemental por la cual proclama el evangelio a todos es el sentido de privilegio.
Privilegio, gracia, gratitud son las expresiones que Pablo emplea al describir su tarea misionera. La deuda u obligación que él siente no representa una carga pesada; más bien, reconocer su deuda es sinónimo de acción de gracias.
Los cristianos tienen una forma de latreia: su conducta ejemplar, que busca la salvación de otros, es un “sacrificio vivo, santo agradable a Dios”, su “adoración espiritual” ofrecida en su diario vivir. Esto sustituye todas sus prácticas cúlticas.

LA MISIÓN Y EL TRIUNFO DE DIOS
El Pablo apocalíptico
Algunos de los elementos asociados con la concepción de Pablo acerca de la misión son: su interpretación de la ley; de la justificación por la fe; de la interdependencia entre la misión a los judíos y a los gentiles; de la prioridad absoluta de la misión a los gentiles para el tiempo presente; del significado universal o, más bien, cósmico del evangelio; de la innegable centralidad de Cristo y del significado de su muerte y resurrección, y de la importancia de su misión como precursora del triunfo venidero de Dios.
Analizaremos este último motivo.
Los eruditos afirman que es necesario entender a Pablo en continuidad con su trasfondo judío. Saulo venía de la tradición apocalíptica judía que inició con Daniel, una tradición que influyo decisivamente en la teología de Pablo el cristiano. Pablo pertenece al judaísmo de antes de la guerra de los judíos y debe ser leído y entendido en este contexto de ambiente apocalíptico. Pablo maneja los temas comunes y corrientes del judaísmo apocalíptico, y dentro de ellos están los cuatro temas básicos: la “reivindicación”, el “universalismo”, el “dualismo” y la “inminencia”. La corriente principal del cristianismo ha rehusado, a través de la historia , aceptar un Pablo apocalíptico.

La iglesia cristiana y el enfoque apocalíptico
No debe sorprendernos que la iglesia cristiana, a través de la historia, ha reaccionado muchas veces negativamente, si no violentamente, ante cualquier manifestación de un enfoque apocalíptico. Como resultado, la escatología futura en gran medida ha ido expulsada de la corriente principal del cristianismo, confinándola al terreno de las aberraciones heréticas.
La resurrección de Cristo llegó a ser percibida como un evento consumado y divorciado de la esperanza de una futura resurrección de los creyentes.
La teología liberal del siglo 19, por ejemplo, simplemente anuló la expectativa escatológica de Pablo referente al futuro como si fuera un mero adorno. También en el protestantismo (especialmente en su rama luterana) a habido la tendencia a declarar que el tema básico de Pablo, con la exclusión de todos los demás , “se encuentra en su comprensión de la ley y la gracia, es decir, en su mensaje de justificación”.
Pablo, sugirió Dodd, reemplazó su enfoque apocalíptico por uno eclesiológico . la propuesta de Oscar Cullmann de entender a Pablo (y todo el Nuevo Testamento) desde la perspectiva de la historia de la salvación, según la cual ya ha sido ganada la batalla decisiva para el Reino de Dios (una especie de día “D”, como en la invasión de Normandía al final de la Segunda Guerra Mundial), aún cuando la ratificación de la victoria (el día “V” de la victoria) todavía está lejano, parece constituirse a primera vista, en una alternativa a las soluciones de Bultmann, Dodd y otros. El énfasis de Cullmann en el evento de Cristo como el eje de la teología cristiana efectivamente desplazó el evento de la gloria venidera de Dios, y, en palabras propias de Cullmann, destronó la escatología.
Beker aboga por la rehabilitación del término “apocalíptico” en oposición al de “escatología”, que se ha convertido simplemente en una palabra hermenéutica para referirse a “lo final”, y cuyo uso es “multivalente y muchas veces caótico”. Por el contrario, “apocalíptico” clarifica el carácter futuro-temporal del evangelio de Pablo y denota un suceso cósmico-universal a la vez que definitivo, al final del tiempo.

Un nuevo centro de gravedad para el enfoque apocalíptico
Pablo, el cristiano, aún formula su espiritualidad en los términos de su herencia apocalíptica (judía), pero le otorga un “nuevo centro de gravedad”, es decir, Jesucristo. El lugar que ocupa la Ley en el judaísmo, ahora lo ocupa el evento de Cristo. La proclamación de la muerte y la resurrección de Cristo forma el meollo del mensaje misionero de Pablo.
La muerte de Cristo significa el juicio apocalíptico sobre toda la humanidad, mientras la resurrección significa el don gratuito de la nueva vida en Cristo para todos.
Pablo se encuentra luchando con un problema: mientras el Mesías ha arribado su Reino no. La muerte y resurrección de Cristo significan la inauguración y anticipación del triunfo venidero de Dios, su introducción y garantía.
La resurrección de Cristo necesariamente apunta hacia la futura gloria de Dios y su consumación. Esto significa que la teología de Pablo no es unifocal sino bifocal: surge del histórico acto de Dios en Cristo y fluye hacia el futuro acto de Dios. Los creyentes, por lo tanto, oran: “¡Marana ta!”: “Ven Señor”

Nueva vida en Cristo
La esperanza de la cual Pablo habla es esperanza únicamente a raíz de lo que Dios ya ha hecho. Los cristianos son santos ahora mismo y reciben el desafío a una santificación mayor; disfrutan ya del don escatológico de la justificación, aun mientras viven en la época presente. Toda la dirección y el contenido de su existencia ha experimentado una metamorfosis. Se han convertido y han pasado de muerte a vida, de las tinieblas a la luz. El Espíritu mora en el creyente, sellándolo como posesión de Cristo. El Espíritu vive y genera vida, porque es el Espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos. De hecho, el Espíritu es el agente de la gloria venidera en el tiempo presente. La incorporación al evento de Cristo traslada al creyente individual a la comunidad de los creyentes. La iglesia es el lugar donde ellos celebran su nueva vida en el presente y se proyecta hacia el porvenir. La iglesia tiene un horizonte escatológico y se constituye en la vanguardia del nuevo mundo de Dios y la señal del amanecer de la nueva era en medio de la antigua. Pero no parece haber mucho más aparte de las “primicias” y “garantía”. Como Abraham, los cristianos creen “contra toda esperanza” (Ro. 4:18), aceptan por fe el testimonio del Espíritu en términos de ser hijos y herederos de Dios y, por lo tato, coherederos con Cristo con una condición, dice Pablo: “si ahora sufrimos con él, también tendremos parte con él en su gloria” (Ro. 8:17).
“Pero tenemos este tesoro en vasijas de barro para que se vea que tan sublime poder viene de Dios y no de nosotros. Nos vemos atribulados en todo, pero no abatidos; perplejos, pero no desesperados; perseguidos, pero no abandonados; derribados, pero no destruidos. Dondequiera que vamos siempre llevamos en nuestro cuerpo la muerte de Jesús, para que también su vida se manifieste en nuestro cuerpo” (2 Cor.4:7-10).
Este pasaje, caracteriza claramente la misión paulina en términos de un evento escatológico: la tensión entre el sufrimiento y la gloria logra sostenerse únicamente dentro del horizonte de la expectativa del fin. Nuestra vida en este mundo tiene que ser cruciforme: Pablo lleva en su cuerpo “las cicatrices de Jesús”, dondequiera carga siempre en su cuerpo la muerte de Jesús, y afirma que siempre es entregado a muerte por causa de Jesús.
Las comunidades paulinas, aunque exclusivas, no son ni introvertidas ni sectarias. Tienen, puertas de entrada en sus fronteras. Tampoco hay evidencia de que la expectativa de la parusía paralice el celo por la misión.
Pablo sólo puede proclamar el señorío de Cristo, no inaugurarlo; la prerrogativa de la inauguración del fin pertenece a Dios. Pablo sólo sabe que es el tiempo asignado a él como apóstol de los gentiles.

El peregrinaje de las naciones a Jerusalén
Pablo tiene la convicción de que por el momento la misión a los gentiles tiene una mayor prioridad que la misión a los judíos. Sin embargo, dice que Dios todavía va a salvar a Israel auque por una ruta tortuosa: ¡la misión a los gentiles! Pablo enfatiza claramente la unidad de la iglesia compuesta por judíos y gentiles. No los judíos de la diáspora, sino los representantes de todos los gentiles serán recogidos desde los extremos de la tierra y llevados a Jerusalén. Únicamente cuando la más distante de las naciones mencionadas en Isaías 66:19 también mande a sus representantes a Jerusalén “la totalidad de los gentiles” (Ro. 11:25) habrá llegado, como también el tiempo de la parusía.
Los gentiles que van a Jerusalén son las primicias de la humanidad redimida. En ellos está representada toda la cosecha y por medio de ellos todos los demás tienen parte en la bendición divina.
El alcanzar “la totalidad de los gentiles” entonces está relacionado íntimamente con la salvación de Israel. Con la “cosecha” de los gentiles Pablo provocará el arrepentimiento de Israel y así precipitara el acto final en el drama de la salvación; la restitución de Israel llevará la historia a su culminación.
La motivación apocalíptica incluye la extensión cósmica de la majestad y la gloria de Dios, que implica una ruptura con la soteriología judía tradicional. Sin embargo, la intervención de Dios en Cristo ha modificado profundamente el marco apocalíptico judío: el Mesías crucificado reemplaza a la Ley, la justicia de Dios se ha manifestado aparte de la ley, a través de la fe en Jesucristo. Ya no hay distinción alguna entre judío y gentil.

El universalismo de Pablo
Pablo proclama la ira de Dios, pero como telón de fondo para un mensaje eminentemente positivo: Dios ya ha venido a nosotros en su Hijo y vendrá otra vez en su gloria. La misión significa la proclamación del señorío de Cristo sobre toda la realidad y una invitación a someterse a dicho señorío. Por tanto, la comisión del apóstol es de ampliar ya, en este mundo, el dominio del mundo venidero de Dios.
Debemos entender a Pablo como un pensador coherente pero no sistemático. Pablo opera con dos imágenes aparentemente opuestas. En los llamados pasajes “particularistas” la imagen dominante es la de Dios-el juez. En esta imagen hay “ganadores” (los que se salvan) y “perdedores” (los perdidos) aunque ni siquiera aquí Pablo elabora el destino de los condenados; Pablo carece de una doctrina del infierno. En los pasajes “universalistas”, por otro lado, la imagen dominante es la de Dios-el rey, que reúne todo bajo su reinado. Los poderes que antes eran hostiles han sido vencidos y ahora rinden homenaje al vencedor. “Toda rodilla”lo confiesa y se dobla voluntariamente ante él. Este es el lenguaje de señorío, no de “salvación”.
Pablo se abstiene de hacer cualquier afirmación inequívoca de una salvación universal. La tendencia hacia tal noción encuentra su equilibrio en el énfasis en la responsabilidad y la obediencia de los que han oído el evangelio. Pablo matiza sus afirmaciones sobre la salvación, añadiendo expresiones como “para los que creen”, “para los que están en Cristo”, “para los llamados”. No hay indicio de que él ceda frente al mandato misionero.
Pablo solamente puede anunciar el señorío de Cristo; no tiene facultad para inaugurarlo. Y los que responden positivamente no lo hacen puramente por voluntad propia. Visto retrospectivamente, su respuesta es un don de Dios: de allí el lenguaje de elección, llamado y predestinación.

Enfoque apocalíptico y ética
El conservadurismo social y el entusiasmo apocalíptico van de la mano. Esperando el Reino inminente de Dios, la gente sale de la sociedad para refugiarse en la iglesia, la cual no es más que un bote salvavidas dando vueltas en un mar embravecido, tratando de rescatar a los sobrevivientes de un naufragio. Además, los aficionados a lo apocalíptico, por lo general, revelan un egoísmo muy particular. Se ven a sí mismos como una especie de elite favorecida. Si llegara a existir un compromiso con otros, por lo general suele adquirir un aire condescendiente. Se practica una “ética de exceso”, donde los que no tienen nada vienen a ser el blanco de la caridad de los que tienen todo.
La perspectiva apocalíptica de Pablo es muy distinta. La iglesia ya pertenece al mundo redimido: es el segmento del mundo que ya obedece a Dios. Como tal, se esfuerza en todas sus actividades con el fin de preparar al mundo para su destino final, sirve al mundo con la firme esperanza de la transformación del mismo en el momento del triunfo final de Dios. La pasión por el Reino venidero va de la mano con la compasión por un mudo necesitado.
En tanto la creación gime, los cristianos también gimen; mientras haya una parte de la creación de Dios gimiendo, no es posible participar de la gloria escatológica. La perspectiva apocalíptica de Pablo no es una invitación a la pasividad ética sino a la participación activa en la voluntad redentora de Dios. Es imposible creer en el inminente triunfo de Dios sin ser agitadores a favor del Reino de Dios aquí y ahora, y sin una ética que se esfuerza y trabaja para mover la creación de Dios hacia la realización de la promesa de Dios en Cristo.
El interés primordial de Pablo es lo que acontece dentro de la comunidad de fe. Su base es la iglesia: apela a los que se han incorporado a Cristo por medio del bautismo. Al mismo tiempo, ve a la iglesia en términos de “reductos” donde rige un estilo de vida alternativo que va influyendo las costumbres de la sociedad que les rodea. La revolución que se está llevando a cabo dentro de la iglesia lleva en sí misma semillas importantes de revolución para las estructuras de la sociedad, constituyen una comunidad de esperanza que gime y trabaja a favor de la redención del mundo entero.
Pablo puede simultáneamente mantener juntas dos realidades aparentemente contradictorias: un anhelo ferviente de ver la irrupción del reinado futuro de Dios; y una preocupación por la extensión misionera, la edificación de comunidades de fe en un mundo hostil y la implementación de una nueva ética social.
Debemos proveer una respuesta, en el espíritu apocalíptico de Pablo, a por lo menos cuatro objeciones fundamentales a mucho del enfoque apocalíptico común: el carácter obsoleto de la cosmovisión apocalíptica; el literalismo del lenguaje apocalíptico, que desorienta a la espiritualidad cristiana; el argumento que sostiene que el enfoque apocalíptico se limita a un significado puramente simbólico, y la refutación de una visión apocalíptica futura por el proceso progresivo de la historia.
Pablo, respondiendo al poder invitador de la hora apocalíptica de justicia y paz, se prepara para este momento yendo “a los extremos de la tierra” e invitando a gente de todas las naciones a convertirse en miembros de la comunidad del fin de la historia.

LA LEY, ISRAEL Y LOS GENTILES
Pablo y el judaísmo
En la actualidad se reconoce en Pablo una actitud mucho más positiva hacia los judíos y el judaísmo en general, y hacia la Ley en particular.
Una relectura tanto de Pablo como de la literatura judía ha contribuido a una nueva percepción del “apóstol de los gentiles”; es claro, especialmente sobre la base de Romanos, que Pablo no concibe a sus semejantes como quienes mataron a Jesús y, por lo tanto, merecedores de la ira de Dios “para siempre”. Pablo comparte muchas convicciones religiosas con sus contemporáneos judíos, tales como su opinión contra la idolatría y su actitud hacia las escrituras hebraicas (en las cuales se basa su propio pensamiento). El no es el “fundador” de una nueva religión sino el intérprete más autorizado de la antigua.

La función de la ley
No es fácil establecer con precisión la naturaleza del problema de Pablo con la Ley; con frecuencia la actitud de Pablo hacia la ley es muy positiva.
Por otro lado, existen dichos en los cuales Pablo parece expresar una actitud extremadamente negativa hacia la Ley, y aún más particularmente respecto a los ritos judíos, sobre todo la circuncisión exigida por los judaizantes a los creyentes gentiles en Galacia.
¿Por qué este ataque tan vehemente contra la Ley?
Pablo ve lo que ningún otro judío ortodoxo había podido ver, aunque quisiera. Intencionalmente o no, para los judíos la Ley había llegado a representar una señal de distinción y, por lo tanto, de falta de solidaridad entre judío y gentil. La Ley separa y por ello aísla un grupo de otro grupo. Los judíos malentendieron sus propias escrituras y su papel como pueblo de Dios. Era esta característica divisiva de la Ley la que rechazaba Pablo. Pablo repudiaba cualquier indicio de “judaización” de los convertidos gentiles.
El encuentro con Cristo de Pablo lo obligó repensar absolutamente todo desde el principio. La “solución” (Cristo) le reveló precisamente cuál era su “aprieto”: la insuficiencia de la Ley para lograr la salvación.

Aceptación incondicional
La muerte sustitutiva de Jesús en la cruz , y sólo ella, abre el camino a la reconciliación con Dios. Dios mismo acepta a cada uno incondicionalmente. Esta es la piedra angular de la teología paulina de la misión.
A partir de esta percepción Pablo llega a una conclusión que realmente constituye una afirmación asombrosa: no hay diferencia entre judío y gentil, “todos han pecado y están privados de la gloria de Dios, pero por su gracia son justificados gratuitamente, mediante la redención que Cristo Jesús efectúo”. Esto es así porque Dios es Dios no sólo de los judíos sino también de los gentiles, “porque no hay más que un solo Dios” y su misericordia es para con todos. Judíos y gentiles, juntos, constituyen “el Israel de Dios”.

El problema de un Israel impenitente
La misión a los gentiles avanzó rápidamente en la época de Pablo. Sin embargo, no sucedió así con la misión entre los judíos.
Pablo es entre todos los autores neotestamentarios, quien más apasionadamente se preocupa por Israel. Su convicción fundamental es que el destino de toda la humanidad se decidirá según lo que le suceda a Israel. A él le duele profundamente que los judíos no estén participando del peregrinaje al monte de Dios en Jerusalén.
El evangelio proclamado por Pablo no es ninguna religión nueva, sino la respuesta al anhelo de Israel por la era mesiánica.
Pero Pablo trata de mantener dos convicciones incompatibles: 1) Dios ha hecho con Israel un pacto irrevocable y le ha dado a Israel su Ley, que invita al pueblo a un cierto tipo de vida recta, y 2) esta rectitud no es la verdadera ya que no se fundamenta en la fe en Jesús.
Pablo busca desesperadamente una fórmula que mantenga intactas las promesas de Dios a Israel y al mismo tiempo insiste en la fe en Cristo.

Romanos 9-11
Estos tres capítulos, los más difíciles, aparecen en la parte intermedia de la carta a los Romanos, cuyo tema dominante se enuncia en 1:16 “el evangelio... es poder de Dios para la salvación de todos los que creen: de los judíos primeramente, pero también de los gentiles”.
Esta sección es un importante “documento de historia de las misiones que apunta hacia el futuro”; y, en este contexto, la sección en discusión “dilucida en particular el propósito y trasfondo de la misión de Pablo a los gentiles”.
La sección del capítulo 11:25-27, constituye la esencia de lo que Pablo quiere comunicar, la culminación, si se quiere, del argumento de los tres capítulos: “Hermanos quiero que entiendan este misterio para que no se vuelvan presuntuosos. Parte de Israel se ha endurecido, así permanecerá hasta que haya entrado la totalidad de los gentiles. De esta manera todo Israel será salvo, como está escrito: “vendrá de Sión El redentor y apartará de Jacob la impiedad. Y este será mi pacto con ellos cuando perdone sus pecados””.
El párrafo 11:25-27 es el clímax. Pablo delinea allí la “estrategia” salvífica de Dios siguiendo una “sorprendente dinámica ondulante en tres actos”: a) el endurecimiento de Israel y la oposición a Cristo llevan hacia b) el surgimiento de la misión gentil, la cual finalmente desemboca en c) la salvación de Israel.
¿Cómo concibe Pablo la “salvación” de “todo Israel”? Según propone Sanders, la llegada de Israel a la fe no será el resultado de una misión apostólica. Dios, no los embajadores humanos, logrará la salvación de Israel. Dios salvará a Israel no antes sino después de que los gentiles hayan entrado, pero siempre bajo la misma condición que en el caso de los gentiles: la fe en Cristo.
Estrictamente hablando Romanos 9-11 no contiene una acusación contra Israel sino “un discurso para la defensa”.

LA IGLESIA: LA COMUNIDAD ESCATOLÓGICA DEL INTERIN
Ekklesia según Pablo
Las iglesias paulinas de los años cincuenta del primer siglo eran todo menos estables cuando Pablo las dejaba, “relativamente desorganizadas, angustiadas, con una instrucción apenas rudimentaria en la fe y en un estado de tensión con la sociedad en general”.
En el concepto de Pablo, la “justicia de Dios”(Ro. 3:21-31) se interpreta como un don a la comunidad, no al individuo, por la sencilla razón de que no existe el creyente individual en aislamiento.
La ekklesia local claramente llega a ser el grupo de pertenencia primario para sus miembros.

El bautismo y la superación de las barreras
La unidad entre los creyentes tiene su base en el hecho de que todos han sido incorporados a Cristo por medio del bautismo. Los creyentes son bautizados en la muerte de Cristo y así mismo levantados de entre los muertos; son crucificados con Cristo, han muerto con él, pero ahora viven con él y están vivos para Dios. Han sido “revestidos” de Cristo crucificado y resucitado, y han sido adoptados como hijos de Dios.
El bautismo es “el sello de pertenencia como miembro del pueblo escatológico de Dios”.
La unidad de la iglesia –más bien la iglesia misma– se pone en tela de juicio cuando los grupos de cristianos se segregan entre sí basándose en distinciones dudosas como raza, etnia, sexo o clase social. Dios nos ha aceptado incondicionalmente en Cristo; tenemos que hacer lo mismo los unos con los otros.

Por causa del mundo
La iglesia esta llamada a ser la comunidad de los que glorifican a Dios demostrando la naturaleza y las obras de él y manifestando la reconciliación y la redención efectuadas por Dios en la muerte, la resurrección y el reinado de Cristo.
En la concepción de Pablo, la iglesia es “el mundo en obediencia a Dios”, la “creación....redimida”.
La iglesia se involucra con el mundo, lo que significa que es misionera. Pablo ubica a todo ser humano en el contexto del mundo y sus estructuras de poder, y enfatiza una solidaridad e interdependencia fuertes entre la iglesia y el mundo. La iglesia es la iglesia en el mundo y para el mundo, lo cual significa que tiene una vocación activa y una misión al orden creado y sus instituciones.
La iglesia es santa, es el cuerpo de Cristo mismo en la tierra. Por lo tanto, cuado los creyentes son insensibles a las necesidades y circunstancias de los demás “menosprecian a la iglesia de Dios”.
La iglesia es la señal del amanecer de la nueva era en medio de la antigua y, como tal, la vanguardia del nuevo mundo de Dios. La iglesia sabe, después de todo, que “este mundo, en su forma actual, está por desaparecer” y que “nos queda poco tiempo”.

EL PARADIGMA MISIONERO PAULINO
¿No es verdad, que el apostolado de Pablo es tan excepcional que no es posible emularlo como tal? Leyendo las cartas de Pablo es posible tener esta impresión. Casi como un hombre orquesta, se enfrenta a todo el imperio Romano. Carga una “necesidad impuesta” o irrevocable.
Las características del paradigma misionero de Pablo son las siguientes:
1. La iglesia como la nueva comunidad
2. ¿Una misión a los judíos?
Algunas observaciones en cuanto a este punto:
Primero. Los cristianos gentiles nunca deben perder de vista que Israel es la matriz del pueblo escatológico de Dios; por ende, tampoco pueden poner en duda la continuidad de la historia de Dios con Israel.
Segundo. Los cristianos gentiles nunca se han portado como huéspedes en la casa de Israel. Al contrario, la iglesia invirtió el orden por el cual las dos comunidades llegaron a unirse: se les cerró la puerta de la casa a los judíos y se tiró la llave.
Tercero. Entablar un diálogo entre judíos y cristianos reviste suma importancia, pero no vamos a dialogar en un vacío sino bajo la sombra de una trágica historia, especialmente la del Holocausto.
Cuarto. Cualquier diálogo teológico y cualquier discusión acerca de Israel deben establecer una distinción entre el lugar de Israel dentro del pacto de Dios y el moderno Estado empírico o nación de Israel.
Quinto. El asunto de la continuación de la misión evangelizadora a los judíos permanece como un punto inconcluso en la agenda de la iglesia.

3. La misión en el contexto del triunfo inminente de Dios.
4. La misión y la transformación de la sociedad.
5. La misión en debilidad.
6. El objetivo de la misión.

Pablo ha sido “apartado para anunciar su evangelio” por Jesucristo, por medio de quien ha recibido el privilegio de una comisión en su nombre “para persuadir a todas las naciones que obedezcan a la fe”. Ha sido enviado a anunciar que Dios ha efectuado la reconciliación consigo y también entre las naciones.
La vida y la labor de la comunidad cristiana están íntimamente ligadas con el plan histórico-cósmico de Dios para la redención del mundo. La salvación de la humanidad, entonces, resulta en alabanza por boca de todas las naciones; en efecto, de toda la creación.
La raíz primaria de la comprensión cósmica que tiene Pablo de la misión es su creencia personal en Jesucristo, crucificado y resucitado, como Salvador del mundo. La misión de Pablo se lleva a cabo, sobre la base de la “solución” y no sobre la base de la “situación”. Sólo retrospectivamente Pablo podía entender lo que significaba una vida sin Cristo. Únicamente a la luz de la experiencia del amor incondicional de Dios podía reconocer el abismo de oscuridad tan terrible en el cual habría caído sin Cristo. Pablo no enfatiza el estado de los de afuera del redil cristiano. Esto sería empezar con “la situación”. Más bien, sabe, sobre la base de la “solución” que ha encontrado, o por la cual él ha sido encontrado, que el evangelio que tiene para predicar es un evangelio de amor incondicional y gracia inmerecida. Su evangelio misionero, por lo tanto, es un evangelio positivo.

8 comentarios:

FERNANDO RODRIGUEZ dijo...

Cuatro
La misión en Pablo:
Una invitación a unirse
A la comunidad escatológica

Primer misionero y primer teólogo
La figura del apóstol Pablo siempre ha fascinado a los misioneros. No nos extrañemos, pues, que a través de los años varios misioneros y misionólogos hayan escrito y publicado monografías sobre su importancia para la misión cristiana
Las cartas consideradas indiscutiblemente paulinas por la mayoría de los expertos: Romanos, 1 y 2 Corintios, Gálatas, Filipenses, 1 Tesalonicenses y Filemón, sin ninguna intención de abordar el tema de la posible autoría de las otras seis cartas atribuidas a Pablo
Su teología es una teología misionera (Hultgren 1985:145), y de que la misión se
Relaciona integralmente con su identidad y pensamiento como tal (:125).

Pablo: su conversión y llamado

Pablo no es el «segundo fundador» del cristianismo, ni la persona que convirtió la religión de
Jesús en la religión acerca de Cristo. No inventó el evangelio acerca de Jesús como el Cristo, sino que lo heredó.
Pablo experimentó una revisión fundamental de su percepción de Jesús de Nazaret y de la validez de la Ley para efectuar la salvación; y a pesar de los muchos e importantes elementos de su cosmovisión que quedaron esencialmente sin alteración

Su encuentro con Jesús alteró radicalmente la comprensión que tenía Pablo del curso de la historia; el hecho de que Jesús fuera el Mesías podía significar una sola cosa para un judío: el comienzo del fin de la historia (cf. Senior y Stuhlmueller1985:227). Pablo lo entiende así al percibir que había llegado la hora de pregonar la salvación en Cristo al mundo gentil. En su experiencia, según su propio testimonio, coinciden su conversión y su llamado a los gentiles (Zeller1982:173).

La estrategia misionera de Pablo
Misión a las metrópolis

Durante las primeras décadas del incipiente movimiento cristiano existían, hablando en general, tres tipos de iniciativas misioneras: (1) los predicadores itinerantes que iban de lugar en lugar a lo largo del territorio judío, proclamando el inminente Reino de Dios (por ejemplo, los profetas de «Q» mencionados en el capítulo 1); (2) los cristianos judíos de habla griega que emprendieron una misión a los gentiles, primero desde Jerusalén (muchas vece forzados a abandonar la ciudad huyendo de la persecución) y luego desde Antioquia; y (3) los misioneros cristianos judaizantes quienes, según 2Corintios y Gálatas, frecuentaban iglesias cristianas existentes con el fin de «corregir» lo que consideraban como una falsa interpretación del evangelio.

Pablo y sus colegas

Ollrog distingue tres categorías de asociados: primero, el círculo más íntimo, incluyendo a Bernabé, Silvano y especialmente Timoteo (:92s.); segundo, «los compañeros de trabajo independientes», como Priscila y Aquila, y Tito (:94s.); y tercero, y quizás más importante, los representantes de iglesias locales, como Epafrodito, Epafras, Aristarco, Gayo y Jasón (:95–106).

La conciencia apostólica de Pablo
La confianza de Pablo en ofrecerse a sí mismo como arquetipo no reside ni en su ser ni en sus logros; más bien, se refiere continuamente a la iniciativa y el poder de Dios en su vida (:59). Así mismo, la osadía de Pablo no se fundamenta, como en el caso de los filósofos, en una libertad moral lograda a través de la razón y el ejercicio de la voluntad; más bien, como lo afirma en 1 Tesalonicenses 2:1–5, es dádiva de Dios. Ello le permite a Pablo enfatizar su propia actitudes darse a sí mismo de un modo que no era posible para los filósofos (:59). Porque él no cree posible distinguir entre su vida y su evangelio (:68), está convencido de que, a través de su vida y ministerio, Dios está llamando a personas al Reino divino y a su gloria (:109).
Su decisión de sostenerse a sí mismo a través del trabajo de sus manos y no aceptar ningún apoyo financiero de las iglesias que fundó (excepto, de manera interesante, de la iglesia en Filipos, cf. Fil. 4:15), debe ser vista como una manifestación de la misma actitud. Trabajaba día y noche, según
escribe a los tesalonicenses, para no ser carga a ninguno mientras les predicaba el evangelio de Dios (1 Ts. 2:9). El meollo de su argumento radica en la última parte de la frase citada: renuncia a su derecho (porque es un derecho, cf. 1Co. 9:4–12) en este sentido, para que el evangelio que proclama sea más creíble. Pablo subraya tal principio de otra manera en 1 Co. 9:19: «aunque soy libre respecto a todos, de todos me he hecho esclavo para ganar a tantos como sea posible» (cf. Haas, 1971:70–72). Un imperativo pesa sobre sus hombros: «¡ay de mí si no predico el evangelio!» (1 Co. 9:16).

La motivación misionera de Pablo
5
Un sentido de preocupación

En contraposición a la idolatría reinante en el mundo grecorromano
En este punto entra a jugar la preocupación de Pablo. El percibe a la humanidad sin Cristo como totalmente extraviada, en camino a la perdición (cf. 1 Co. 1:18; 2 Co. 2:15), en urgente necesidad de la salvación (ver también Ef. 2:12).

El propósito de la misión de Pablo, entonces, es llevar a las personas a la salvación en Cristo. Esta perspectiva antropológica, sin embargo, no es el objetivo final de su ministerio. En éste y a través de éste, Pablo está preparando al mundo para la gloria venidera de Dios y para el día cuando todo el universo lo adorará

Un sentido de responsabilidad

La responsabilidad primaria de un cristiano común y corriente no es salir a predicar sino apoyar el proyecto misionero a través de una conducta atractiva, y hacer que «los de afuera» se sientan bienvenidos en medio de la comunidad.

Un sentido de gratitud

Únicamente a partir de este punto podemos llegar al nivel más profundo de la motivación misionera de Pablo. El va hasta los confines de la tierra debido a la experiencia abrumadora del amor de Dios que ha recibido por medio de Jesucristo. [El] Hijo de Dios… me amó y dio su vida por mí»,

La misión y el triunfo de Dios

El Pablo apocalíptico

Lo apocalíptico se ha caracterizado muchas veces por la presunción de un presente vacío y una salvación relegada completamente al futuro. La desesperación y frustración del tiempo presente impulsa a los seres humanos a anhelar una redención en el futuro,

Las descripciones del futuro en Lindsey son deterministas al extremo, su visión apocalíptica carece de un enfoque cristo lógico, el material bíblico citado está divorciado totalmente de su contexto histórico, su esperanza para el futuro es egoísta al máximo y en su apocalíptica no hay lugar para una teología de la cruz (Beker 1984:26s.).


La Iglesia cristiana y el enfoque apocalíptico

Precisamente
Por esta razón, dice Beker, el término «apocalíptico» tiene que ser restablecido como un concepto teológico válido y rescatado de los grupos que le han otorgado tan mala reputación


Un nuevo centro de gravedad para el enfoque apocalíptico

La división fundamental de la humanidad ya no es entre los fieles a la Torah y los «gentiles pecadores» (2:15) y malvados, sino que se define sobre la base de la muerte de Jesucristo como el foco de la ira y el juicio universales de Dios. La muerte de Cristo significa el juicio apocalíptico sobre toda la humanidad, mientras la resurrección significa el don gratuito de la nueva vida en Cristo para todos.

Nueva vida en Cristo

La reconciliación con Dios, la justificación, la transformación en el aquí y ahora, sin embargo, no es algo que le ocurre a un individuo de manera aislada. Su incorporación al evento de Cristo traslada al creyente individual a la comunidad de los creyentes. La Iglesia es el lugar donde ellos celebran su nueva vida en el presente y se proyectan hacia el porvenir.



El peregrinaje de las naciones a Jerusalén

Los gentiles que van a Jerusalén son las primicias de la humanidad redimida. En ellos está representada toda la cosecha y por medio de ellos todos los demás tienen parte en la bendición divina (cf. Aus1979:257–260; Hultgren 1985:135s.).

El Mesías de Israel es el Señor exaltado (Kyrios) de todo el cosmos y esto significa que no existe alternativa a su afirmación de soberanía, la cual se proclama a la humanidad entera. Pablo desarrolla estas dimensiones cósmicas de la salvación particularmente en su carta a los Romanos. «Salvación para todos» puede ser la clave hermenéutica para toda esta carta (para más detalle cf. Hahn 1965:99s; Rütti 1972:117s.se le comisionó que proclamara al mundo

La misión significa la proclamación del señorío de Cristo sobre toda la realidad y una invitación a someterse a dicho señorío. Por medio de su predicación Pablo busca evocar la confesión: «Jesús es el Señor» Dios inició en Cristo, el cual concierne a las naciones y a toda la creación, y cuyo clímax es la celebración de la gloria final de Dios (Beber 1980:7s., 354s.; 1984:16). Por tanto, la comisión del apóstol es de ampliar ya, en este mundo, el dominio
Del mundo venidero de Dios (cf. Beber 1984:34, 57).

Enfoque apocalíptico y ética

Pablo está convencido de que, en Cristo, Dios ha reconciliado al mundo consigo mismo y que la era entre la resurrección de Cristo y la parusía es el] tiempo que le fue concedido como apóstol para inaugurar la primera etapa de la convocatoria a las naciones bajo el señorío de Cristo
Pablo puede simultáneamente mantener juntas dos realidades aparentemente contradictorias: un anhelo ferviente de ver la irrupción del reinado futuro de Dios; y una preocupación por la extensión misionera, la edificación de comunidad desde fe en un mundo hostil y la implementación de una nueva ética social




La ley, Israel y los gentiles

La apologética, sin embargo, no es la única razón para el cambio de imagen de Pablo. Una relectura tanto de Pablo como de la literatura judía ha contribuido a una nueva percepción del «apóstol de los gentiles».
En primer lugar, sus comentarios en 1 Tesalonicenses 2:14–16 tienen que interpretarse en el contexto de la carta (la primera carta escrita por pablo) y no pueden ser universalizados (Räisänen 1983:262s., 264);
Segundo lugar, ha crecido cada vez más la conciencia de que la carta a los Gálatas («la carta más arrebatada de Pablo»;Martyn 1985:309) fue escrita con un propósito polémico bien específico, a saber, contrarrestar la influencia de los judaizantes. Gálatas, entonces, no debe interpretarse como un tratado teológico sistemático, sino como un documento escrito para
Un contexto muy específico (cf. Beker 1980:37–58 y Lategan 1988).
En tercer lugar, Pablo comparte muchas convicciones
Religiosas con sus contemporáneos judíos, tales como su opinión sobre la idolatría y su actitud hacia las escrituras hebraicas
(En las cuales se basa su propio pensamiento). Una nueva escritura (un «nuevo testamento» distinto y opuesto al
«Antiguo») es tan inconcebible para Pablo como para muchos de los primeros cristianos. El no es el «fundador» de una
Nueva religión sino el intérprete más autorizado de la antigua (cf. Beker 1980:340s., 343). En cuarto lugar, como ha señalado Sanders (1983:192), el hecho de que Pablo se somete al castigo decretado por las autoridades judías (cf. 2 Co.11:24) demuestra que todavía se considera (igual que sus jueces) un miembro del pueblo judío. El castigo implica inclusión.

La función de la ley
A Pablo se le abrió esta perspectiva cuando conoció al Cristo resucitado.24 No la recibió a través de ninguna intervención humana, ni se la enseñaron; le vino como«revelación» (1:12–17). Aquel evento lo convenció que a través de Jesús, crucificado y resucitado, Dios estaba ofreciéndola salvación a todos.


Pablo llega a una conclusión que para nosotros puede parecer trivial, pero que realmente constituye una afirmación asombrosa: no hay diferencia entre judío y gentil. En primer lugar, todos «están bajo el poder del
Pecado» (Ro. 3:9), y «privados de la gloria de Dios» (Ro. 3:23). Cada persona se encuentra bajo algún «señorío» u otro —del pecado, de la Ley, de la naturaleza humana, de dioses falsos, etc., (cf. Ro. 1.18–3:20) — y, por lo tanto, es igualmente culpable y está igualmente perdida. En efecto, la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia (Ro.
1:18) (cf. Dahl 1977a:78; Walter 1979:438s; Senior y Stuhlmueller 1985:235; Stegemann 1984:302). Ni la sabiduría humana, como sugerían los griegos, ni la Ley, como creían los judíos, puede salvar de «la ira venidera» (1 Ts. 1:10; Ro. 3:20; 5:12–14). Por cuanto todos pecaron, la muerte se ha extendido a todos (Ro. 7:11).A este veredicto negativo, sin embargo, Pablo contrapone uno positivo: «todos han pecado y están privados de la gloria de Dios, pero por su gracia son justificados gratuitamente, mediante la redención que Cristo Jesús efectuó» (Ro. 3:23s.;cf. 2:15–17). El evangelio sí es el «poder de Dios para la salvación de todos los que creen» (Ro. 1:16). Así como Dios era«imparcial» en su juicio, de la misma manera es ahora «imparcial» o, mejor, lleno de gracia para con todos, sin acepción de personas (cf. Ro. 2:11).

El problema de un Israel impenitente

La misión a los gentiles avanzó rápidamente en la época de Pablo. Sin embargo, no sucedió así con la misión entre
Los judíos. Para Pablo «el hecho de que la mayoría de sus parientes se hubiera cerrado al evangelio fue la experiencia más deprimente de su vida» (Mussner 1982:11). Esta experiencia amarga le provocó las palabras conmovedoras de Romanos9:1–3:

«Vendrá de Sión El redentor
Y apartará de Jacob la impiedad.
Y éste será mi pacto con ellos
Cuando perdone sus pecados».

La Iglesia: la comunidad escatológica del ínterin
Ekklesia según Pablo


En el concepto de Pablo, la «justicia de Dios» (cf. Ro. 3:21–31) se interpreta como un don a la comunidad, no al individuo (cf. Luz 1968:168–171), por la sencilla razón de que no existe el creyente individual en aislamiento. Esto surge particularmente en sus dos cartas a los creyentes en Corinto, donde algunos interpretan su libertad en Cristo como permiso para actuar como se les da la gana, un concepto de la vida cristiana rechazado categóricamente por Pablo
(cf. Gaventa 1986:45). No cabe en la Iglesia un ser aislado o egoísta (Beker 1984:37). Cuando un individuo experimenta la«justificación por la fe», se une a la comunidad de creyentes. «Los miembros de la comunidad de los últimos días no viven una vida solitaria» (Malherbe 1987:80). De hecho, los cristianos «son una comunidad especial» (:94). Se los llama «santos», los «elegidos», los que han sido «llamados», «amados» y «conocidos» por Dios (para las referencias, cf. Meeks1983:85). Su conducta debe reflejar lo que son en Cristo

Lo distintivo del Nuevo Testamento es que Dios y el prójimo están más cerca a ellas [las comunidades paulinas] que los judíos y los griegos; el concepto de comunidad tiene otra importancia, mucho mayor aún; los valores son más intensos y por esta razón los adjetivos que expresan emoción son también más frecuentes.

El bautismo y la superación de las barreras

El bautismo es «el sello de pertenencia como miembro del
Pueblo escatológico de Dios» (Käsemanno 1969b:119). A los corintios Pablo les dice: «Todos fuimos bautizados por un solo
Espíritu para constituir un solo cuerpo —ya seamos judíos o gentiles, esclavos o libres» (1 Co. 12:13). A los gálatas le s escribe en tono similar: «Porque todos los que han sido bautizados en Cristo se han revestido de Cristo. Ya no hay judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús» (3:27s.; cf. también Ef.3:6). El bautismo, entonces, conscientemente efectúa un cambio radical en las relaciones interpersonales y en la comprensión que los creyentes tienen de sí mismos (Malherebe 1987:49). La fe en Cristo hace posible la comunión.

Por causa del mundo

En la concepción de Pablo, la Iglesia es «el mundo en obediencia a Dios», la «creación … redimida» (Käsemann1969b:134). Su misión primordial en el mundo es ser esta nueva creación. Su misma existencia debe ser por causa de la gloria de Dios. Y precisamente esto produce un efecto en «los de afuera»

El paradigma misionero paulino

Pablo desarrolló su teología y estrategia misioneras en un contexto bien específico. La única salida de este dilema es una vez más, como hemos venido sugiriendo en capítulos anteriores, extrapolar a partir de Pablo, permitirle «fertilizar» nuestra imaginación y, dependiendo de la guía del Espíritu Santo, prolongar de manera creativa la lógica de la misión y teología de
Pablo en medio de circunstancias históricas que son, en muchos aspectos, muy distintas de las de él. No «entendemos» al verdadero Pablo si solamente lo «atamos» al primer siglo.

En tal espíritu intentaremos a continuación la tarea de identificar las características del paradigma misionero de Pablo.

1. La Iglesia como la nueva comunidad. Las iglesias que deben su existencia a la actividad misionera de Pablo se encuentran en un mundo dividido culturalmente (griegos vs. bárbaros), religiosamente (judíos vs. gentiles), económicamente (ricos
Vs. pobres) y socialmente (esclavos vs. libres). En las mismas iglesias incipientes (particularmente en Corinto) hay facciones, y como prueba de ello tenemos el registro de la desunión y las peleas. Sin embargo, Pablo no negocia sus principios. Para él es imposible rendirse frente a la necesidad de la unidad de un solo cuerpo a pesar de sus múltiples diferencias.
Este rasgo distintivo no es simplemente un truco pragmático o una estrategia contra la fragmentación sectaria. Más bien, tiene su base en un principio teológico: para quienes han sido una vez «bautizados en Cristo» y «revestidos de Cristo» ya no puede haber separación entre judío y gentil, entre esclavo y libre, entre varón y mujer, entre griego y bárbaro; todos ahora son «uno en Cristo» (3:27s.). Ahora «nos concebimos en términos de nuestro bautismo y no en términos de nuestro nacimiento». Nuestra unidad no es negociable nunca
2. ¿Una misión a los judíos? El concepto paulino de la relación entre la Iglesia e Israel va ligado al punto anterior, pero constituye también, desde otra perspectiva, una especie de caso particular. ¿Son los judíos, tal vez, el único grupo religioso?
. En primer lugar,
Tenemos que preguntarnos si hay eventos que rebasen las expectativas de Pablo, las cuales expresa aquí tan apasionadamente.
Y dado el caso, ¿no sería anacrónico apelar a estos versículos como la respuesta final para las preguntas de hoy? En segundo lugar, ¿no corremos el riesgo de depender demasiado de un solo pasaje, ignorando así otras afirmaciones no sólo en el Nuevo Testamento en general, sino en Pablo mismo? (cf. Kirk 1986:249). En tercer lugar, ¿se puede negar que mucha de la sensibilidad contemporánea frente a los puntos de vista judíos y sus aspiraciones, juntamente con sus demandas del reconocimiento de «la importancia sagrada de la supervivencia judía» (J. T. Pawlikowski, citado en Kirk,1986:250), han de atribuirse a la mala conciencia, especialmente de los cristianos de Occidente, después del exterminio en masa de los judíos en la II Guerra Mundial?
A la luz de estas y otras preguntas similares, arriesguemos unas observaciones en cuanto al tema en discusión.
Primero, los cristianos gentiles nunca deben perder de vista que Israel es la matriz del pueblo escatológico de Dios;
Segundo, los cristianos gentiles nunca se han portado como huéspedes en la casa de Israel. Al contrario, la Iglesia invirtió el orden por el cual las dos comunidades llegaron a unirse: se les cerró la puerta de la casa a los judíos y se tiró la llave (Fr. Daniel, citado en Kirk 1986:253). Muchas generaciones de cristianos gentiles han ignorado su dependencia de la fe de Israel y, justificándose a sí mismos si n reparo, se han jactado de su fe en contraposición a «los judíos». Y han ido aún más allá. La relación de los cristianos con los judíos a lo largo de la historia ha sido una cadena de perversión, malentendidos, odio y persecución.
Tercero, entablar un diálogo entre judíos y cristianos reviste suma importancia, pero no vamos a dialogar en un vacío sino bajo la sombra de una trágica historia, especialmente la del Holocausto. Sin embargo, a pesar del dolor y la tragedia, en este diálogo debemos mirar, más allá de semejante evento, al hecho de que el cristianismo y el judaísmo comparten una misma raíz y una Escritura común, aunque difieren profundamente en su
Cuarto, cualquier diálogo teológico y cualquier discusión acerca de Israel deben establecer una distinción entre el lugar
De Israel dentro del pacto de Dios y el moderno Estado empírico o nación de Israel.
Finalmente, las reflexiones de Pablo sobre «la Iglesia e Israel» demuestran similitudes sorprendentes con las de Mateo y Lucas. Todas pertenecen al mismo paradigma general. Sin embargo, existen también diferencias significativas entre los tres autores. Las reflexiones de Pablo, en particular, se caracterizan por una tensión casi insoportable pero a la vez creativa.
3. La misión en el contexto del triunfo inminente de Dios. He dedicado considerable atención a la comprensión que Pablo tenía de su misión dentro del horizonte de la parusía de Cristo. Sin embargo, han pasado más de diecinueve siglos desde que Pablo proclamó el cercano fin del mundo, y sus expectativas no se han cumplido. Beker (1984:64) cita a James M.
4. La misión y la transformación de la sociedad. Una discusión de la perspectiva apocalíptica paulina plantea el problema de la relación entre Iglesia y mundo y la pregunta en torno a si escatología apocalíptica tiene algo que decir al llamado de la Iglesia en la sociedad.
5. La misión en debilidad. Pablo no da espacio a sus lectores para ningún escape ilusorio del sufrimiento, la debilidad y l a muerte de la hora actual, por medio de la proclamación entusiasta de que Cristo ya ha ganado la victoria final. Tampoco permite que sus lectores se unan a sustentadores de la visión apocalíptica e interpreten el dolor y la miseria que encuentran como evidencia de la ausencia de Dios en la era maligna actual, la cual afortunadamente no durará mucho (cf. Rütti1972:167). Más bien, la «revaloración de todos los valores» que hace Pablo (porque esto es, de hecho, lo que hace) tiene otro origen: la tensión creativa de la existencia cristiana entre la justificación ya otorgada y la redención garantizada.

He argumentado que la teología de Pablo es bifocal en el sentido de que enfoca tanto la acción pasada de Dios en Cristo como su acción futura
Pero él me dijo: «Te basta con mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad.» Por lo tanto, gustosamente haré más bien alarde de mis debilidades, para que permanezca sobre mí el poder de Cristo. Por eso me regocijo en debilidades, insultos, privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.También aparecen similares conexiones contrastantes en otras secciones. En 4:8s. Ellos se encuentran atribulados, no abatidos; perplejos, no desesperados; perseguidos, no abandonados; derribados, pero no destruidos. El texto de 6:8–
10 muestra otra serie de opuestos: engañadores, pero veraces; desconocidos, pero bien conocidos; moribundos, pero viviendo; golpeados, pero no muertos; pobres, pero enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada aunque poseyéndolo todo.
Para Pablo el sufrimiento no es sólo algo que se tiene que soportar pasivamente a causa de los ataques y la oposición de los poderes de este mundo, sino también, y tal vez primordialmente, una expresión del involucramiento activo de la iglesia en el mundo, motivado por la posibilidad de su redención (cf. Beker 1984:41). El sufrimiento, por tanto, es un modo
De involucramiento misionero (cf. Meyer 1986:111). Pablo carga en su cuerpo «las cicatrices de Jesús» (6:17) adquiridas por ser siervo de Cristo (cf. 2 Co. 11:23–28). Comparte los sufrimientos de Cristo (2 Co. 1:5) y completa en su carne «lo que falta de las aflicciones de Cristo, en favor de su cuerpo, que es la Iglesia» (Col. 1:24). Pablo carga en su cuerpo la muerte de Jesús; la muerte está activa en él, pero la vida está activa en los que han llegado a la fe por medio de
Él (2 Co. 4:9, 12). Si él está afligido, entonces, esto es por causa de la salvación de ellos (2 Co. 1:6). Hacia el final de 2Corintios lo expresa aun de otra manera: «Así que de buena gana gastaré todo lo que tengo, y hasta yo mismo me desgastaré del todo por ustedes» (12:15).
6. El objetivo de la misión. En las líneas iniciales de su carta a los Romanos Pablo formula brevemente los objetivos de su apostolado: ha sido «apartado para anunciar su evangelio» por Jesucristo, por medio de quien ha recibido el privilegio de una comisión en su nombre «para persuadir a todas las naciones que obedezcan a la fe» (Ro. 1:5) (cf. Legrand 1988:156–158). Ha sido enviado a anunciar que Dios ha efectuado la reconciliación consigo y también entre las naciones. Esta tarea le lleva alrededor de los límites de mundo mediterráneo, donde rehúsa edificar sobre el fundamento de otros porque el tiempo es corto y la tarea urgente (Senior y Stuhlmueller 1985:252). Dondequiera que llega funda ekklesiai, iglesias, las cuales se espera que sean la manifestación de la nueva creación que ahora está «restaurada al estado del cual cayó Adán» y en las cuales ya no reinan los poderes del mundo, con excepción de la muerte. (Käsemann 1969b:134).Por importante que sea la Iglesia, para Pablo no es la meta final de la misión. La vida y la labor de la comunidad cristiana están íntimamente ligadas con el plan histórico-cósmico de Dios para la redención del mundo. En Cristo, Dios ha reconciliado al mundo, no sólo a la Iglesia, consigo mismo (2 Co. 5:19) y esto es lo que Pablo debe proclamar: «La universalidad del evangelio hace juego con la universalidad de la labor de apóstol, es decir, proclamar la victoria salvífica de Dios sobre su creación»
La raíz primaria de la comprensión cósmica que tiene Pablo de la misión es su creencia personal en Jesucristo, crucificado y resucitado, como Salvador del mundo. Proclamarlo puede ser «motivo de tropiezo para los judíos y… locura para los gentiles», pero «para los que Dios ha llamado, lo mismo judíos que gentiles, Cristo es el poder de Dios y la sabiduría de Dios (1 Co. 1:23s.), a cuya comunión han sido llamados (1 Co. 1:9). La misión de Pablo se lleva a cabo, como lo ha demostrado Sanders, sobre la base de la «solución» y no sobre la base de la «situación». Sólo retrospectivamente Pablo podía entender lo que significaba una vida sin Cristo. Únicamente a la luz de la experiencia del amor incondicional de Dios podía reconocer el abismo de oscuridad tan terrible en el cual habría caído sin Cristo. Lo que expresa en1 Tesalonicenses 1:4 y 10 («Hermanos amados de Dios, sabemos que él los ha escogido»; y «Jesús… nos libra del terrible castigo venidero» es una confesión de haber sido salvado por el acto de Dios en Jesús, no un pronunciamiento acerca de los otros que no creen (cf. Boring 1986:276s.). Así que Pablo no enfatiza el estado de los de afuera del redil cristiano.
Esto sería empezar con «la situación». Más bien, sabe, sobre la base de la «solución» que ha encontrado, o por la cual él ha sido encontrado, que el evangelio que tiene para predicar es un evangelio de amor incondicional y gracia inmerecida. Su evangelio misionero, por lo tanto, es un evangelio positivo.

Edgar Samuel Bonilla dijo...

Seminario Teológico Bautista Mexicano. Campus “Horeb”
Materia: Naturaleza y misión de la iglesia II
Profesor: Pastor Rafael Pola Baca
Alumno: Hno. Edgar Samuel Bonilla Munive
Reporte de Lectura

Misión en transformación
David J. Bosch
Libros Desafío 2005
Michigan, E.U.

Capitulo 4
LA MISIÓN EN PABLO:
UNA INVITACIÓN A UNIRSE
A LA COMUNIDAD ESCATOLÓGICA

La idea principal de este capitulo es identificar el perfiles del apóstol Pablo como teólogo y misionero.

Primer misionero y primer teólogo

Hoy en día se acepta ampliamente que Pablo fue el primer teólogo precisamente porque fue el primer misionero (como apóstol de Jesucristo)
Las fuentes primarias son las cartas apostólicas escritas por el mismo Pablo y las secundaria es el libro de los hechos de Lucas.

Pablo su conversión y llamado

Su encuentro con el Cristo resucitado lo convirtió en:

De un fariseo de fariseos En el apóstol de Cristo a los gentiles

De un perseguidor del incipiente Su mayor protagonista
movimiento cristiano

De una persona convencida de En una persona que lo abrazo como el
que Jesús era un engañador y centro de su vida y aún del universo.
amenaza para el judaísmo
El evento de Cristo significa, entonces, como el trastocamiento de los siglos y, para Pablo, la proclamación de un nuevo orden de cosas que Dios ha iniciado en Cristo. El Mesías crucificado y resucitado reemplaza la Ley como medio para alcanzar salvación.

La estrategia misionera de Pablo
Misión a las metrópolis.- En las primeras décadas se encuentran tres tipos de estrategias misioneras:
1.- Los predicadores itinerantes que iban de lugar en lugar a lo largo del
territorio judío, proclamando el inminente Reino de Dios.
2.- Los cristianos judíos de habla griega que emprendieron una misión a los
gentiles, primero desde Jerusalén y luego desde Antioquía.
3.- Los misioneros cristianos judaizantes quienes frecuentaban iglesias
cristianas existentes con el fin de corregir lo que consideraban como una
falsa interpretación del evangelio.
El apóstol Pablo incorpora elementos de los dos primeros tipos mencionado arriba, al mismo tiempo, los modifica de modo decisivo. (Romanos: 15:15-21).
Pablo estaba involucrado en una misión con base en ciertos centros estratégicos. Con frecuencia él habla de una misión dirigida hacia varios países y regiones geográficas. Pablo concentra sus esfuerzos en las capitales de distritos y provincias, cada una de las cuales representa una región entera.

Pablo y sus colegas .- La práctica misionera de Pablo tiene que ver con su manera de valerse de sus asociados, verdaderos colegas:
1.- Círculo más íntimo; Bernabé, Silvano y Timoteo
2.- Compañeros de trabajo independiente; Priscila y Aquila y Tito
3.- Los representantes de iglesia locales; Epafrodito, Epafras, Aristarco, Gayo y Jasón.
Las iglesias ponen a personas a disposición de Pablo por periodos limitados. A través de ellas tienen una representación en la misión paulina y llegan a ser corresponsables de la obra.
Pablo concibe su misión siempre en función de la iglesia.

La conciencia apostólica de Pablo
La conciencia apostólica que Pablo tiene de sí mismo, se presenta como modelo para sus colaboradores y para todo cristiano.
Esta confianza de Pablo en si mismo se refiere continuamente a la iniciativa y el poder de Dios en su vida, esto le permite enfatizar su propia actitud de darse a si mismo.
Y esta convencido de que a través de su vida y ministerio, Dios está llamando a personas al Reino divino y a su gloria. Un imperativo pesa sobre sus hombros "¡ay de mí si no predico el evangelio!" (1 Co. 9.16).

La motivación misionera de Pablo
Se han identificado tres principales motivos que tanto Pablo como la iglesia misma tenían:
Un sentido de preocupación.- los dioses que en realidad no lo son toman control de los hombres. Se vuelven esclavos de ellos. En contraste Pablo predica a Dios como vivo, único y verdadero. El percibe a la humanidad sin Cristo como extraviada, en camino a la perdición, a la muerte. Y su mensaje se centra en la Salvación en Cristo. El propósito de Pablo es llevar a las personas a la salvación.
Un sentido de responsabilidad.- Pablo muestra una profunda percepción de que su obligación es proclamar el evangelio a los gentiles y la meta principal es el Imperio Romano que en ese momento tiene el poder político y económico.
Un sentido de gratitud.- La responsabilidad primaria de un cristiano es apoyar el proyecto misionero a través de una conducta atractiva. Unicamente a partir de este punto podemos llegar al nivel más profundo de la motivación misionera de Pablo. El va hasta los confines de la tierra debido a la expresión abrumadora del amor de Dios que ha recibido por medio de Jesucristo.

La misión y triunfo de Dios
Pablo Apocalíptico.- Los elemento asociados con su misión son:
1.- Su interpretación de la ley
2.- La justificación por la fe
3.- La interdependencia entre la misión a los judíos y a los gentiles
4.- El significado universal o cósmico del evangelio.
5.- La innegable centralidad de Cristo y del significado de su muerte y
resurrección.
6.- La importancia de su misión como precursora del triunfo venidero de Dios.

La ley, Israel y los gentiles
Pablo y el judaísmo.- En la época del imperio Romano los fariseos intentaron reorganizar y consolidar la vida religiosa judía, al mismo tiempo que introdujeron medidas que hacían imposible que los cristianos judíos mantuvieran vínculos con la sinagoga.
La función de la ley.-
Aceptación incondicional.-
El problema de un Israel impenitente.-

La iglesia: la comunidad escatológica
Pablo tiene el concepto de iglesia como una comunidad con características helénicas y judías cristianas.
Ekklesia según Pablo.- El concepto de justicia de Dios se interpreta como un don de Dios a la comunidad no al individuo.
El bautismo y la superación de las barreras.- La unidad de los creyentes se basa en el hecho de que todos han sido incorporados a Cristo por medio del bautismo.
Por causa del mundo.- La Iglesia está llamada a ser la comunidad de los que glorifican a Dios demostrando la naturaleza y las obras de Él.

El paradigma misionero Paulino.
El paradigma paulino de la misión se entiende en cuanto a la profunda manera de presentar una visión universal, cristiana y misionera
Pablo desarrolló su teología y su estrategia misionera desde su contexto muy específico.
1.- La iglesia como la nueva comunidad
2.- ¿Una misión a los judíos
3.- La misión en el contexto del triunfo inminente de Dios
4.- La misión y la transformación de la sociedad.-
5.- La misión en debilidad.-
6.- El objetivo de la misión

omar martinez dijo...

LA MISIÓN EN PABLO: UNA INVITACIÓN A UNIRSE A LA COMUNIDAD ESCATOLÓGICA

CAPITULO IV

El interés de muchos misionólogos ha estado centrado en los métodos misioneros de Pablo, y las lecciones que de ellos se pueden extraer.
Este capítulo se concentra casi exclusivamente en las cartas paulinas sin entrar en el análisis de Hechos, debido a que Hechos sigue siendo una fuente secundaria respecto a Pablo. Se considerarán únicamente las cartas consideradas indiscutiblemente paulinas por la mayoría de los expertos: Romanos, 1 y 2 Corintios, Gálatas, Filipenses, 1 Tesalonicenses y Filemón. Todas estas cartas se escribieron durante los años de servicio misionero activo de Pablo después de salir de Antioquia, un período de siete u ocho años que va aproximadamente del 49 al 56 d.C. Esto significa que Pablo escribió sus cartas quince o veinte años antes que Marcos escribiera su Evangelio, y treinta o más antes que Mateo y Lucas escribieran los suyos.
Su teología es una teología misionera, y la misión se relaciona integralmente con su identidad y pensamiento como tal. La comprensión de la misión de Pablo es “un análisis de la realidad desencadenado por una experiencia inicial que proporcionó a san Pablo una nueva visión del mundo” (Señor y Stuhlmueller 1985).
Se sugiere hablar de “llamado”, en lugar de “conversión” de Palo. El mismo Pablo habla teológicamente de recibir el llamado a ser el apóstol a los gentiles, aludiendo sin duda a los llamados de Isaías y Jeremías a ser profetas. Como en el caso de ellos, su vocación parte de un acto decisivo de Dios, comunicado a través de una revelación y una visión (Gá 1:15).
Pablo experimentó un cambio radical de valores, de definición propia y de compromiso, y es preferible usar el término “conversión” o por lo menos “transformación” para describir su experiencia. Fue una experiencia primordial que Pablo percibió como paradigmática para cada cristiano. El que quiere seguir a Cristo tiene que morir a la ley, entre otras cosas, lo cual significa abandonar o renunciar a algo, y esto sí es lenguaje de conversión.
De la misma comunidad que había perseguido, Pablo heredó el evangelio que habría de proclamar.
Es posible que Pablo abrazara el significado pleno de su llamado sólo paulatinamente. La etapa más vital de su misión a los gentiles empezó realmente algunos años después de su experiencia en el camino a Damasco.

De la misma comunidad que había perseguido, Pablo heredó el evangelio que habría de proclamar. Es posible que Pablo abrazara el significado pleno de su llamado sólo paulatinamente. La etapa más vital de su misión a los gentiles empezó realmente algunos años después de su experiencia en el camino a Damasco.
La visión de Pablo es global en términos del mundo conocido por él. Pablo está en el proceso de fundar iglesias, a las cuales busca nutrir a través de ocasionales visitas pastorales y largas cartas, y enviándoles sus colaboradores. Intercede a favor de sus congregaciones y les aconseja respecto a una gran variedad de asuntos bien prácticos y terrenales; espera que crezcan en madurez espiritual y mayordomía, y que lleguen a ser faros en su medio ambiente.
La confianza de Pablo en ofrecerse a sí mismo como arquetipo no reside ni en su ser ni en sus logros; más bien, se refiere continuamente a la iniciativa y el poder de Dios en su vida. Está convencido de que, a través de su vida y ministerio, Dios está llamando a personas al Reino divino y a su gloria.
Aquí es donde entra la preocupación de Pablo. El percibe a la humanidad sin Cristo como totalmente extraviada, en camino a la perdición, en urgente necesidad de la salvación. La idea del juicio inminente sobre los que “no obedecen la verdad” es un tema reiterativo en Pablo. Por eso no descansa. Pablo es embajador de Cristo; Dios apela a los perdidos a través del apóstol y sus colaboradores.
Pablo es deudor a Cristo, lo cual se traduce en una deuda a quienes Cristo quiere traer a la salvación. La obligación ante quien murió produce una obligación ante aquellos por quienes murió. El creyente tiene una deuda tan grande con los no creyentes como su deuda con Cristo.
La manera de predicar el evangelio que tiene Pablo se da en un marco de flexibilidad, sensibilidad y empatía”. Para Pablo la razón más elemental por la cual proclama el evangelio a todos es el sentido de privilegio.
Elementos asociados con su concepción de misión: su interpretación de la ley, la justificación de la fe; interdependencia entre la misión a los judíos y los gentiles; prioridad absoluta de la misión a los gentiles; del significado universal del evangelio; la centralidad de Cristo y significado de su muerte y resurrección y su misión como precursor del triunfo venidero de Jesús.
No debemos sorprendernos que la iglesia cristiana, a través de la historia haya reaccionado muchas veces negativamente ante cualquier manifestación de un enfoque apocalíptico.
Los cristianos han sido transformados y se les exhorta a continuar el proceso de ser transformados. El contexto apocalíptico en el cual Pablo ve su misión también emerge de su convicción de que por el momento la misión a los gentiles tiene una mayor prioridad que la misión a los judíos.
Pablo proclama la ira de Dios, pero como telón de fondo para un mensaje eminentemente positivo: Dios ha venido a nosotros y vendrá en su gloria en su Hijo. El interés primordial de Pablo es lo que acontece dentro de la comunidad de fe.
Absolutamente nada en la tradición judía había preparado Pablo para esta percepción revolucionaria. Ahora él sabe que toda la humanidad tiene la posibilidad de trasladarse de la muerte a la vida y del pecado a Dios, no a través de la ley dad en el Sinaí sino a través de Cristo. La misión a los gentiles avanzó rápidamente en la época de Pablo. La iglesia, según Pablo es una comunidad misionera.
La unidad entre los creyentes tiene su base en el hecho de que todos han sido incorporados a Cristo por medio del bautismo.
La iglesia está llamada a ser la comunidad de los que glorifican a Dios demostrando la naturaleza y las obras de él.
Paradigma misionero de Pablo:
1. La iglesia como la nueva comunidad.
2. ¿Una misión a los judíos?
3. La misión en el contexto del triunfo inminente de Dios.
4. La misión y la transformación de la sociedad.
5. La misión en debilidad.
6. El objetivo de la misión.

naves dijo...

Misión en transformación.

Capítulo cuatro.

La misión en Pablo: una invitación a unirse a la comunidad escatológica.

Primer misionero y primer teólogo.

La figura del apóstol Pablo siempre ha fascinado los misioneros, el autor se centra exclusivamente en las cartas de Pablo. Romanos, 1 y 2 Corintios, Galatas, Filipenses, 1Tesalonicenses y Filemón; 1 Tesalonicenses fue la primer carta de Pablo, y romanos o Filipenses la última. Toda las cartas escribieron durante los años de servicio misionero de Pablo, después de salir de Antioquia en aproximadamente siete u ocho años, se calcula que lo hizo 15 o 20 años antes que Marcos. “El sabía que Dios lo había enviado al mundo a proclamar el Evangelio, no para contemplar y especular” “por una experiencia inicial le dio una visión nueva del mundo” “hay en ellas algunos puntos difíciles de entender”.

Pablo: su conversión y llamado.

En este punto donde Pablo mismo empezó, siendo un fariseo de fariseos (Galatas 1. 4; Filipenses 3. 4-5) siendo un perseguidor de los primeros cristianos, convencido de que Jesucristo era un engañador. Las referencias suelen ser muy sobrias y sirve únicamente al propósito de superar el origen no humano de su evangelio. En vez de hablar de la “conversión” debemos hablar de su “llamado”. Pablo experimentó un cambio radical de valores, de definición propia y de compromiso. El que quiere seguir a Cristo tiene que morir a la ley, entre otras cosas (romanos 7.4) “su concepto de apostolado se caracteriza por el hecho de haberse convertido y al mismo tiempo de recibido el en cargo del Evangelio y su Comisión a los gentiles” Dios, dice Pablo, “tuvo a bien revelarme a su hijo para que yo lo predicar a entre los gentiles” (galatras 1. 15, 16). Muchos judíos del greco parlantes miraban con desprecio y hasta horas y en el mundo pagano, Pablo surgió de esos círculos; nunca abandonó los puntos de vista e dados de los “helenistai”.”Pablo no volver a ser repudiado por las autoridades de Jerusalén, pero de igual manera es incapaz aceptar que tengan algún derecho a jugar su predicación”
La misión de la Iglesia no tendrá éxito sin la unidad de la Iglesia en la verdad del Evangelio.
La estrategia misionera de Pablo.

Misión a las metrópolis.

En las primeras décadas del movimiento cristiano tenía tres tipos de iniciativa misionera: (1) los predicadores itinerantes; (2) los cristianos judíos de habla griega que emprendieron una misión a los gentiles; y (3) los misioneros cristianos Judaizantes. La visión misionera de Pablo Escobar, por lo menos en términos del mundo conocido por él “nuestra salvación está ahora más cerca que cuando inicialmente creímos” (romanos 13. 11) (15. 23) “ahora que ya no me queda un lugar donde trabajar, “para notificar sobre fundamento ajeno” (romanos 15. 20). Sería una mala mayor dormía ir a lugares donde ya han sido evangelizados por otros.

Pablo y sus colegas.
Pablo tiene que ver con su manera de valerse de sus asociados. Concibe su misión siempre en función de la Iglesia.

La conciencia apostólica de Pablo.

Se presenta como un modelo a ser imitado, no sólo por sus colaboradores, sino por todo cristiana “ustedes se hicieron imitadores nuestros y del señor” (1 Tesalonicenses 1. 6); y con su propio comportamiento, demostrar lo que enseñaba. A través de su ministerio, Dios está llamando a personas al reino divino y a su gloria. “golpeó mi cuerpo y lo domino, no sea, después de haber predicado a otros, yo mismo que de descalificar” (1 Co. 9. 27)”que basta con mirarse, pues ni poder se perfecciona en la debilidad” (2 Co. 12.9) “porque cuando soy débil entonces el fuerte” (12. 10) “aunque soy libre respeto a todos, de todos en hecho esclavo para ganar a tantos como sea posible” (1Co.9. Número adicional) “¡ay de mí sino predicó el Evangelio!” (1Co. 9.16).
La motivación misionera de Pablo.
Se veían tres motivos misioneros en Pablo: un sentido gratitud, un sentido de responsabilidad, y un ser sido de preocupación.

Un sentido de preocupación.

Lo más previsible para Pablo es la idolatría. Los ídolos son fabricados por mentes pervertidas (romanos 1. 23, 25) “se dejan arrastra ciegamente tras ídolos mudos” (1 Corintios 12. 2). En contraste con la idolatría reinante en el mundo grecorromano habló proclama un solo Dios que exige la lealtad absoluta del individuo. Un dios vivo y verdadero (1Ts. 1. 9). El percibe a la humanidad sin Cristo como totalmente extraviada. “En nombre de Cristo le rogamos que se reconcilien con Dios” (2Co. 5. 20)”la conversión ha atraído a los convertidos del reino de la muerte y la falsedad al reino de la vida y la realidad de Dios” (1Ts.1.9) la meta no es alcanzar el potencial natural, sino la formación de Cristo en el creyente. La salvación, para Pablo, es la experiencia de una liberación inmerecida,a través del encuentro con único Dios y padre de Jesucristo. El propósito de la misión de Pablo, entonces, es de llevar a las personas a la salvación en Cristo.para la gloria venidera de Dios y para el día cuando todo el universo lo adorará.

Un sentido de responsabilidad.

Su obligación es proclamarse el Evangelio “¡ay de ti si no predico el Evangelio!” (1Co.9. 16), “por tanto, como sabemos lo que es tener al señor, tratamos de persuadir a todos” (2Co.5. 11). Cada una de estas referencias enfatiza una deuda tanto con Cristo como con las personas a las cuales Pablo es enviado. Estos versículos revelan más el sentido de responsabilidad de Pablo que su metodología misionera. El Evangelio de Jesucristo es para todos, sin distinción; y él, Pablo, está bajo obligación de tratar de “ganar”.

Un sentido de gratitud.

“El hijo de Dios... Me amó y dio su vida por mí” (galatas 2. 20) y en romanos “Dios ha derramado su amor en nuestro corazón” (5. 50).Dios me ha concedido el privilegio de ser su apóstol, para qué en toda la nación es allá quienes crean en él y le obedezcan. (Romanos 1. 5). Privilegio, gracia, gratitud (jaris). Un sacrificio hubo ofrenda motivada por el amor.

La misión y el triunfo de Dios.

El Pablo apocalíptico.

La importancia de su misión como precursora del triunfo venidero de Dios.

La Iglesia cristiana y el enfoque apocalíptico.

El énfasis recayó sobre el peregrinaje espiritual del creyente individual en la vida después de la muerte, en vez de una resurrección de los muertos en el futuro “siempre viene un futuro prominente”.

Un nuevo centro de gravedad para el enfoque apocalíptico.

La proclamación de la muerte y la resurrección de Cristo, forma el meollo del mensaje misionero de Pablo (1 Corintios 15). Creo mientras el Mesías ha arribado, su reino no. La resurrección de Cristo necesariamente apunta hacia la futura gloria de Dios y su consumación, “cada vez que comen este pan y deben esta copa, proclama la muerte del señor hasta que él venga” (1Co.11. 26). En el caso de Pablo el enfoque apocalíptico es, en efecto, “la madre de la teología”.


Nueva vida en Cristo.

Disfrutan ya del don escatológico de la justificación. La gente debería admitir que, a pesar de vivir sus medio de un mundo cuya estructura está pereciendo, destinadas a parecer, ha llegado a ser parte de la nueva creación de Dios (2Co.5. 17;Ga.6. 15). El espíritu viví y generalidad, porque es el espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos (romanos 8. 9-11) “si ahora sufrimos con él, también tendremos parte con él en su gloria” (romanos 8. 17) “en todos somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó” (8. 37) “yo dispuesto a las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito” (8. 28). Donde quiera que vamos siempre vamos en nuestro cuerpo la muerte de Jesús, para que también su vida se manifieste en nuestro cuerpo. (2 Corintios4. 7-10).

El peregrinaje de las naciones a Jerusalén.
La misión a los gentiles tiene una mayor prioridad que la misión a los judíos. Los gentiles que van a Jerusalén son las primicias de la humanidad redimida. El alcanzar la totalidad de los gentiles (romanos 11: 25)”parte de Israel se ha endurecido” (11. 25) la conversión de los gentiles puede provocar celos a los judíos y ellos también aceptarán a Jesús como Mesías (11. 14). Pablo no puede contemplar ni siquiera por un momento la posibilidad de un Israel perdido eternamente. La intervención de Dios en Cristo ha modificado profundamente el marco apocalíptico odio: el Mesías crucificado reemplaza la ley. Por la muerte de Jesús el judío en la Cruz, toda la unidad se encuentra frente a la posibilidad de pasar de la muerte a la vida, del pecado a Dios. (Romanos 3. 21-. 30). Ya no hay distinción alguna entre judío y gentil. Todos pecaron y son justos y caros por la gracia de Dios por medio de Jesucristo. El dios no sólo de los judíos, sino también de los gentiles. Yo se deja en contra aún por aquellos que ni siquiera estamos buscando (romanos 10. 20)”salvación para todos” pues es la clave hermenéutica para toda esta carta.

El universalismo de Pablo.

Dios ha venido a nosotros en su hijo y vendrá otra vez en su gloria. “Jesús es el señor” (romanos 10. 9; 1Co.12.3; Fil.2.11). La Comisión del apóstol es ampliar ya, en este mundo, el dominio del mundo venidero de Dios. Todo el mundo necesita oír el Evangelio de la justificación por la fe (romanos 10. 14). Pablo se abstiene de hacer cualquier afirmación inequívoca de una salvación universal. “Pablo matiza sus afirmaciones sobre la salvación, añadiendo expresiones como para los que creen, a los están en Cristo, para los llamados”.

Enfoque apocalíptico y ética.

¿Cómo relaciona Pablo está comprensión apocalíptica de la misión con la ética? “Uno religioso porque proporcionan los que sufren un modo soportar, ofreciéndoles sueños privados para compensar los una intolerable realidad pública”. “Este mundo, Enzo Palencia actual, está por desaparecer” (1Co.7.31). La Iglesia sirve al mundo una firme esperanza de la transformación del mismo en un momento del triunfo final de Dios. La pasión por el reino venidero va de la mano con la compasión por un mundo necesitado (romanos 12). La vida y el trabajo de la comunidad cristiana están íntimamente ligados al plan cósmico- histórico de Dios para la redención de todo el universo. La auténtica esperanza apocalíptica impone, entonces, una seriedad ética. Ya no el judío y gentil, mezcla un libro, ni Barón mi mujer (gala tras 3. 28). Hablo, en contra de su costumbre, dedica una carta entera sólo a este tema. Filemón. Dios quiera sólo en sus manos y… Transformar todas nuestras luchas gemidos presentes” (: 17). Invitando a gente de todas las naciones a convertirse en miembros de la comunidad del fin de la historia.

La ley, Israel y los gentiles.

La misión judía, por ahora, parecer sutil. La misión a los gentiles, al contrario, ha sido sorprendentemente exitosa, la salvación de los judíos llegará a realizarse solamente a través de un esfuerzo enérgico entre los gentiles.

Pablo y el judaísmo.

Los fariseos intentaron reorganizar y consolidar la vida religiosa judía, al mismo tiempo que introdujeron medidas que hacían imposible que los cristianos judíos mantuvieran sus vínculos con la sinagoga.
La función de la ley.

La salvaciones por la gracia del juicio por obras; las obras son la condición para permanecer “dentro”, pero no consiguen la salvación. “Pablo y el judaísmo palestino ven de manera distinta la oposición entre gracia y obras”. Nov en conflicto entre fe en Cristo y el cumplimiento de la ley. En romanos 9. 4 escribe respecto a sus compatriotas, los israelitas: “de ellos son la adopción como hijos, la gloria divina, los pactos, la ley, y el privilegio de adorar a Dios y contar con sus promesas” en romanos 15. 8 aún llama a Cristo “servidor de los judíos”. Un pueblo que vive según la promesa y la gracia. La ley y no se opone al Evangelio sino que atestigua a favor de él (romanos 3. 21). Un atrás de los ritos externos y no al significado fundamental de la ley. La interpretación superficial de la ley por parte de los cristianos gentiles pervierte la esencia del Evangelio de la salvación en Cristo. La ley nutre el exclusivo judío y, por lo tanto tiene que ser abrogada. Para los judíos la ley había llegado a representar una señal de distensión. Aquel evento lo convenció que a través de Jesús, crucificado resucitado, Dios estaba ofreciendo la salvación a todos.

Aceptación incondicional.

Ahora él sabe que toda la humanidad tiene la posibilidad de trasladarse de la muerte la vida y del pecado a Dios, no a través de la ley dada en Sinaí sino a través de Cristo.
El problema de un Israel impertinente.

“El hecho de que la mayoría de sus parientes se hubieran cerrado al Evangelio fue la experiencia más deprimente de su vida.

Pero entonces, si alguno les faltó la fe, ¿acaso su falta de que anula la fidelidad de Dios? ¡De ninguna manera!” (Romanos 3. 1-4 a).
Romanos 9-11.

El Evangelio… Es poder de Dios para la salvación de todos los que creen: de los Judíos primeramente, pero también los gentiles (1.16). “vendrá de sión el redentor y apartará de Jacob la impiedad. Y este será mi pacto con ellos cuando perdone sus pecados”. “Yo cierra los ojos de Israel para que los gentiles puedan de la gloria que Dios ha parado para ellos también”. Los judíos también se salvan solamente por la fe en Cristo. Sólo Dios salvará a Israel. Cristo ha llegado a segundo “servidor de los judíos” (romano 15.8)para que los gentiles puedan alegrarse “con el pueblo de Dios” (15. 10). Dios salvará únicamente a los que responden entre adelante.

La Iglesia: la comunidad escatológica del ínterin.
Ekklesia según Pablo.

En el griego contemporáneo, ekklesia es la reunión municipal de los varones libres de una ciudad de constitución griega. Cuando un individuo experimenta la” justificación por la fe”, se une a la comunidad de creyentes. De hecho, los cristianos “son la comunidad especial”. Su conducta debe reflejar lo que son en Cristo. Ekklesia en los escritos de Pablo generalmente se refiere a la congregación local.

El bautismo y la superación de las barreras.

La unidad entre los creyentes tiene su base en el hecho de que todos han sido incorporados a Cristo por medio del bautismo. Son bautizados en la muerte de Cristo y asimismo levantados entre los muertos; son crucificados con Cristo, han muerto con él, pero ahora viven y están vivos para Dios (romanos 6. 3-11) han sido “revestidos” de Cristo crucificado y resucitado, y han sido adoptados como hijos de Dios (galatas 3. 26; colosenses 3.10). Pablo cuando hablaba del bautismo de los creyentes en Cristo es lo que lo motivaba a declarar con tanta pasión y vehemencia que la Iglesia trasciende toda barrera humana. Los grupos de cristianos se segregan entre sí. Por razas, etnias, sexo o clase social. Judíos y gentiles se unen sin distinción para ser un solo pueblo de Dios. El murió por todos (2 Corintios5. 14). “Bienvenidos a la nueva comunidad donde todos somos miembros de una sola familia y estamos ligados por el amor”.

Por causa del mundo.

En la concepción de Pablo, la Iglesia es “el mundo en obediencia a Dios”. “Cartas de recomendación…” Para ser conocidas y leídas por todos (2 Corintios3: 1, 2)”en el mundo entero se habla bien de su fe” (romanos 1. 8)”comunidad de esperanza mientras gime y trabaja para la redención del mundo””comunidad creada y amada por Dios” la Iglesia es ahora el pueblo escatológico de Dios y un testimonio vivo de la ratificación de las promesas de Dios a su pueblo Israel. (2 co.11. 28). La Iglesia sabe, después de todo, que “este mundo, en su forma actual, está por desaparecer”.

El paradigma misionero Paulino.

“La unidad de la teología y la evangelización y de la justificación porque y la misión mundial”. Eleva su propio llamado a los niveles de las vocaciones de un Isaías o un Jeremías (romanos 1.1; Ga. 1. 115).se ha constituido en ministro de un nuevo pacto (2Co.3. 6) un colaborador de Dios (1Co.3.9). Siendo “intachables y puros, hijos de Dios sin culpa en medio de una generación torcida y depravada” (Fil.2. 15) y pensando siempre en todo lo verdadero, todo lo nuestro, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable y de buen nombre (Fil.4.8). Características del paradigma misionero de Pablo:
1. La Iglesia como la nueva comunidad. Se encuentra un mundo dividido culturalmente (griegos contra bárbaros), económicamente (ricos contra pobres) y socialmente (esclavos contra libres). Se corría el riesgo de la desunión y las peleas, sin embargo Pablo no negocia sus principios. “Bautizados en Cristo” y “respiros de Cristo” ya no puede haber separación entre judíos y gentiles, entre esclavos libre, entre varón y mujer, ente griego y bárbaro, ahora todos son “uno en Cristo” (Ga.3. 27).

2 ¿una visión a los judíos? “Proteger al Israel incrédulo” y salvaguardar la paz de todo judíos (romanos 9 al 11).Primero. La Iglesia no es el nuevo Israel, más bien se trata de un Israel ensanchado. Segundo. Los cristianos gentiles nunca se han portado como huéspedes en la casa de Israel. Al contrario, la Iglesia invitó el orden por el cual las dos comunidades llegaron a unirse: se les cerró la puerta de la casa a los judíos y se tiró la llave. La relación de los cristianos con los judíos a lo largo de la historia ha sido una cadena de prevención, malentendidos, odio y persecución. Tercero. El cristianismo y el judaísmo comparten una misma raíz y una escritura común, aunque difieren profundamente en su concepto de la revelación del Dios que tienen en común. Cuarto. Cualquier diálogo o discusión acerca de Israel debe establece una distinción entre lugar de Israel dentro del pacto de Dios y el moderno estado empírico o nación de Israel. Quinto. “Fusión entre la Torah y Cristo” es inadmisible. Si lo que importa no es la carne de Abraham sino su fe. (Ga.3.7).

3. La misión en el contexto del triunfo inminente de Dios.

Pablo tenía a su misión dentro del horizonte de la parusía de Cristo. Sin embargo, han pasado más de 20 siglos desde que Pablo declaró el cercano fin del mundo, y sus expectativas no se han cumplido. “Si la esperanza que tenemos en Cristo fuera sólo para esta vida, seríamos los más desdichados de todos los mortales” (1Co.15. 19).

4. La misión y la transformación de la sociedad.

En la época de Pablo el reciente nacido movimiento cristiano estaba en la periferia de la sociedad, que era una entidad y pene operable en términos de tamaño y que su supervivencia desde el punto de vista humano, peligraba.

5. La misión en debilidad.

La “visión cercana” de Pablo lo ayuda a percibir la batalla entre Dios y los poderes de la muerte; su “visión lejana” le permite que vergonzosamente ya el resultado final de la batalla.

5. El objetivo de la misión.
Ha sido “apartado para anunciar su Evangelio” “hará persuadir a todas las naciones que obedezcan a la fe” (Ro.1. 5). En Cristo Dios ha reconciliado al mundo, no sólo a la Iglesia, consigo mismo (2Co.5. 19). En el nombre de Jesús toda rodilla se doble “en el cielo y la tierra y debajo de la tierra” (Fil.2.9-11)”fue designado con un poder hijo de Dios o la resurrección” (Ro.1. 4). Únicamente a la luz de la experiencia del amor incondicional de Dios podría reconocer el abismo Dios cubrirá tan terrible en el cual habría caído sin Cristo. Su evangelio misionero, por lo tanto, es un evangelio positivo.

Francisco Naves dijo...

Ser, hacer y decir 3.y 4

Salmos, sabiduría y misión integral.

Si hay una característica unificadora de estos libros de su carácter poético. Dios quiere amigos que entiendan lo que él hace, en vez de siervos que no lo comprendan (Juan 15. 15).

Salmos.

El libro los salmos tiene oración para pedir, para celebrar, para lavar, para meditar, etc..

Súplicas.

Es el grupo más grande del libro. El salmo 13 es un buen ejemplo.

Buscar a afectar lamentos de Dios.

1 aprendamos al optar por el estoicismo 2. Aprendamos a no tratar de mantener una cara falsa santidad frente Dios. Éstos salmos expresan el riesgo completo de las emociones humanas. Dios puede usar hasta las situaciones más espantosas para lograr sus propósitos (romanos 8. 28). Podemos usar el dio en la barriga de sentidos: 1. Ello como yo mismo 2. Ello como Cristo número… yo como mi vecino 4 de yo con mi enemigo.

Acciones de gracias.

Muchas de las súplicas incluyen un voto.

Los signos suelen tener los elementos: la invitación imperativa a la alabanza, y la alabanza misma. Solemos usar esos salmos en nuestros cultos, podemos también usarlos para enriquecer y revisar nuestras prácticas de alabanza en general. Dios cuida el mundo diariamente (salmo 104). La grandeza y la pequeñez del ser humano (salmo 8). El reino de Dios salmos (47, 93, 96-99).

Litúrgicos.

El grupo principal de los salmos litúrgicos tiene que ver con el rey humano (su coronación, su boda, su salida para la batalla, etc.). Primero hemos reconocido de éstos una dimensión histológica. Segundo, estos amos pueden ayudar a reflexionar sobre cómo vemos nosotros el mundo político.

Meditación.

En los salmos de meditación (o de sabiduría) la meta no es tanto llevar a cabo una de estas transacciones sino profundizar en el entendimiento de lo que está pasando, enfocando temas como la ley de Dios o la justicia. Primero, nos animan a reflexionar. Segundo, dudan un modelo de cómo llevar nuestras preguntas y dudas al corazón de nuestras oraciones. Pueden profundizar nuestra propia reflexión sobre la ley vivificante de Dios (1, 19, 119).

Conclusión.

Salmos tiene una trayectoria desde la petición (la queja) hasta la alabanza.

Proverbios.

Pide lo que quieras que yo te de (1R3.5) (Salomón) yo que ruego que le deja tu siervo discernimiento para gobernar a tu pueblo y para distinguir entre el bien y el mal (1R3. 9). En realidad proverbios tiene que ver más con los libros sobre la formación de ejecutivos (como los siete hábitos) que con los libros de filosofía. El prólogo (1. 1-7) define las metas pedagógicas del escrito, y también un modelo de cómo funciona: se trata de una lista sencilla con un principio familiar al fin. Nos desafía y apoya en cuanto a algunos temas clave:-la necesidad de la sabiduría-“justicia, juicio y equidad”-el temor de Yahvé. “Los sabios valoran el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y de enseña”. Como relacionarnos con la búsqueda humana de la sabiduría, la búsqueda de sociedades más humanas. Proverbios nos ofrece un modelo para una respuesta más adecuada, además dos retratos de nuestro mundo: el mundo según su naturaleza, y el mundo en contra de su naturaleza; el primero es creado por Dios.

En el campo del pobre hay abundante comida pero esta se pierde donde hay injusticia (13.23)”no respondas al necio según su necedad, O tu mismo pasarás por necio”, responde la lesión como se merece, para que no se tenga por sabio (Pr.26. 4-5). Inútil es el proverbio en la boca del necio como inútiles o las piernas de un tullido (26. 7)
El charlatán Pierre corra lengua como una espada, pero la lengua del sabio brinda alivio (12. 18). La lengua que brinda consuelo es árbol de vida; la lengua insidiosa deprime el espíritu (15. 4).

Proverbios puede ayudarnos a reconocer los costos probables y seleccionar las batallas que realmente vale la pena.

Job.

Entrar en la conversación entre Job y Dios puede nutrir una espiritualidad para este peregrinaje que es la vida. Satanás queda silenciado, pero Job no ha empezado todavía. No es lo mismo ver los toros desde la barrera. Él se atrinchera. Es pecador, pero no merece todo esto. La descripción de la experiencia los pobres que crean y mantienen la pobreza es tan poderosa como la de los profetas. ¿Dónde está Dios?
Después un intermedio de intención y calidad disputada (Eliú), aparece Dios. Siguen cuatro capítulos lleno de belleza y poder. Sin embargo, Dios testifica la que Job ha hablado con él con rectitud (42.8). El compromiso divino con la justicia existe dentro de este compromiso con la acción gratuita, y no viceversa. Si Job es evidencia, esto es precisamente lo que no debemos hacer. Dios restaura la prosperidad de Job. “No había en todo el país mujeres tan bellas como las hijas de Job. Quien les dejó una herencia, lo mismo que a sus hermanos” (42. 15). Ya al final del libro, Job refleja bien el carácter de su Dios.

Eclesiastés.

Eclesiastés es un libro raro, con la contribución muy importante para nosotros. Un rey notable de Jerusalén. Salomón. El patrón de sabiduría. Clama también por la justicia, y no la encuentra, ni de parte de los seres humanos ni de parte de Dios. “El agua para los bueyes y el vino para los reyes”. Por un lado Dios si juzga (7. 17; 11.9). Por otro lado, parece que el juicio no discrimina entre el justo y el malvado (3. 17-21). No seas demasiado justo, emisario en exceso; ¿por qué habrá de destruirte?; ¿por qué habrá de morir antes de tu tiempo? (7.16-17). La humildad reconoce que somos humanos, y no dioses. Sirve también para la misión integral cuando hay que nutrir coaliciones de grupos heterogéneos. Los placeres sensuales, las relaciones íntimas y la satisfacción en el trabajo deben recibirse como regalo de la mano de Dios (9. 17-10). En este mundo no es posible garantizar que los resultados de nuestro trabajo se han sostenibles (24) ¡la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente! (4.9-12). El gozo en el trabajo depende de la solidaridad. Esta combinación de fe, humildad y anhelo, en espera de que Dios ha galgo nuevo, nos ayuda a seguir leyendo Eclesiastés. Este libro es una ayuda imprescindible en los contextos oscuros y ambiguos en los que nos encontramos hoy en día.

Cantares.

Tradicionalmente hemos leído estos poemas como una alegoría del amor entre Dios y su esposa (Israel, la Iglesia, el alma) y nada más. Este libro explora al amor entre Dios e Israel por medio de la metáfora del amor humano, y explora el amor humano a la luz de este amor entre Dios e Israel. Nos ofrece una visión de su restauración, y por eso puede animar y guiar nuestro peregrinaje rumbo a la integridad.

Hombre y mujer.

No su mundo es un mundo distorsionado por el dominio de los varones sobre las mujeres (Génesis 3. 16) “tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreara de ti”. Yo soy para mí amado: y su deseo tiende hacia mi (7. 10). La topografía de su cuerpo en la geografía de Israel. A la luz de los desafíos de la sensualidad, somos tentados a verla como una amenaza a nuestra vida comunitaria. Este libro nos ofrece una manera de ejercitar nuestra sensualidad para recolectarlos y abrirnos al descubrimiento constante. Se puede usar con parejas que están preparándose para el matrimonio, o en ministerios con parejas. Se ve la diferencia entre lo erótico y lo pornográfico.

La humanidad y la creación.

La tranquilidad y lo agreste sirve como el escenario para los amantes. (2. 10-13). Su despertar primaveral de vida, su fertilidad, refleja lo que está dentro de los amantes. Cantares, en otras palabras, es un modelo espiritual que abarca también nuestro encuentro con la tierra y nuestra mayordomía de ella.

La humanidad y Dios.

Las imágenes poéticas de encuentros entre amantes en cantares despiertan ecos de encuentros con el amante ¡cuán bella eres, amada mía, cuán bella eres! ¡Tus ojos son dos palomas! (1. 15) “por la noche sobre el hecho busco el amor de mi vida” (3. Uno). Aceptar la sensualidad y buscar transformar nuestras prácticas a la luz del Evangelio es difícil de imaginar. En cantares nos muestra porque vale la pena.

Conclusión.

“La gloria de Dios es la humanidad con plena vida, y la vida de la humanidad es la visión de Dios”.





Ser, hacer y decir 4.

Los profetas y la visión integral.

Los profetas clásicos del antiguo testamento, que proclamaron alternativas poderosas durante la época de la monarquía en Israel, se preocuparon por desmantelar estructuras injustas que reducían al ser humano a un objeto. Estos profetas vivieron y ejercieron sus “llamados” durante tres épocas cruciales de la historia del pueblo de Dios. En primer lugar, los profetas del siglo 8ª. C. se enfrentaron con la crisis de ser atacados por el gran imperio asirio. El siglo seis a. C. este pueblo sufre otra vez otra crisis existencial, los babilonios atacan el reino del sur, (Judá) encienden la ciudad, derriban por completo el templo. Todo esto fue anunciado por los profetas. El pueblo pierde su identidad, su tierra, etc. Años más tarde Esdras escribe cuando regresan unos 52,000 habitantes bajo el liderazgo del gobernador Zorobabel y del sacerdote Jesúa. En los siguientes años se levantaron varios profetas para animar y desafiar al pueblo quienes se desenvolvían entre sacerdotes y reyes. Algunos fueron “profetas falsos”, que sólo veían sus propios intereses.

El sacerdocio como institución en Israel.

Este servicio se efectuaba por los jefes de familia o de la tribu. En realidad el servicio nació en los tiempos de Moisés, y eran mediadores entre Dios y los seres humanos. Esto no tenían un llamado como los reyes o los profetas, normalmente eran heredados. Fue con Aarón que los sacerdotes se deberían separar del resto de la tribu, funcionaban como guardianes del santuario y servían como facilitadotes para los sacrificios y como intérpretes de los oráculos. Deberían ayudar a entender la torah y servían como educadores, días y velaban por bienestar del pueblo con el tiempo fueron perdiendo autoridad de respeto lo que dio lugar a los reyes y profetas.

La realeza como institución en Israel.

Durante muchos años el pueblo de Israel vivió bajo la institución de la realeza. Todo esto surgió por qué el pueblo exigió que el juez y el profeta Samuel les proveían un rey (Deuteronomio 17. 14-20). Los reyes no llegaron a cubrir la expectativa que Dios había pretendido. Muchos hicieron lo opuesto. Lo que originó una gran protesta e indignación por parte de los profetas llamados por Dios.

Los profetas como institución en Israel.

La persona en función del profeta fue creciendo y cambiando con el tiempo, aún que fueron llamados de diferentes formas.

Ro’eh
“vidente”, es decir operar más como a divinos (1S 9.9, 11). Es el caso que al profeta Samuel así le llamaron, sin embargo a Ezequiel no se lo caracteriza con ese término (Ez.20.1).

Jozeh.

“Vidente” fue con Amos Isaías y Miquedas que se uso este término.

Navi’.

Se fue con Jeremías que se usó este término. “Colocar la palabra en la boca del profeta”. Se identificaron dos tipos de discurso: 1. Ora ángulos divinos (Jeremías 15. 2-9). 2. Oráculos proféticos (Mi.3. 5-8). Con este término se distinguió a los profetas que eran muy creativos en su discurso.

Ish ha elohim.

“Hombre de Dios”, Elías y Eliseo “hombres santos”. Mundo de lo sagrado dentro de lo profano.

El contenido del mensaje Profético.

El pueblo debería de mantener un compromiso con Dios, pero una y otra vez había rechazado a Dios. Entonces el profeta hace un llamado urgente al arrepentimiento y una reconciliación genuina con Dios. El profeta trata varios temas el amor, la paciencia, la fe, la injusticia, el servicio de Dios, y la impunidad de los que tienen el poder.

Lo medular del mensaje profético.

El problema principal.

El profeta llamado por Dios porque existe un problema grave en la sociedad de Israel. Numeró uno discernir cuáles eran los problemas. La presencia de un liderazgo corrupto, que no cumplen con sus responsabilidades, corrupción e insensibilidad de los líderes del pueblo, Ezequiel 22.25, 26, 27, 29.El profeta de la injusticia, la corrupción, y la denuncia. El profeta es implacable.

Una propuesta de solución.

Practicar la justicia, amar la fidelidad y caminar en humildad (Miqueas seis. Ocho). El amor a Dios y el amor al prójimo. “Pero decidí actuar en honor a mi nombre” (Ezequiel 20. 14). Dios se ve en la obligación de defender su santo nombre (Ezequiel 36. 20). Hace un llamado en primer lugar a practicar la justicia. Natán es el ejemplo del agachón (2S12); Dios tampoco acepta pasivamente que Acab y Jesabel se hayan apropiado de la propiedad de Nabot (1 Reyes 21). Dios es un enamorado de la justicia.

En segundo lugar. Dios espera que el hombre han en la fidelidad (jesed) (óseas 6. 6) amar su prójimo como se ama asimismo (Lucas 10. 27). El desafío para el ser humano es discernir de qué manera Dios fue solidario, para luego invitarlas en la comunidad humana. El tercer eje del marco teórico ofrecido por el profeta Miqueas es el de caminar humildemente ante Dios. “Humíllate ante Dios”. Existía una intensa preocupación de los profetas por el shalom de sus contemporáneos.

Isaías.

Denunciar las injusticias que sufrían los más débiles de la sociedad (Isaías 10. 1-3). Una visión integral ejercida hoy deberá tomar muy en cuenta el ejemplo de Isaías. Dejar de pecar con impunidad, estaba entre tejido con el llamado a buscar la justicia, a cuidar a huérfanos, a defender a la viuda y a proteger al más débil.

Jeremías.

Vio a su pueblo derrotado y llevado como esclavo a Babilonia. Él se identificaba plenamente con el pueblo, denunció al liderazgo que tenía el poder, y hace un análisis de sus consecuencias. Confronta a los poderosos por su falta de ética, de justicia y de compasión por los más débiles. Enseña que hay una relación directa entre la realidad espiritual y la opresión ideológica y material de los poderosos. El profeta tiene pasión por la vida, y por esta dispuesto a arriesgar su vida. Le dice directamente al rey Joacim que el conocimiento de Dios es sinónimo de hacer justicia a los pobres.. Proclamó que era muy importante “conocer a Dios” (práctica la justicia, amar jesed, y caminar en humildad con Dios) (Miqueas).

A modo de conclusión.

Para su continente latinoamericano no habrá esperanza a menos que la comunidad cristiana entienda que su mensaje debe considerar la totalidad de lo humano y ser productora de camino de esperanza.

Francisco Naves dijo...

Misión en transformación 9.

La misión a partir de la ilustración.

El perfil de la cosmovisión de la ilustración.

Esta tuvo una gran influencia sobre el protestantismo. La Iglesia católica tuvo dos cambios para informáticos. Respecto tanto a la ilustración como el periodo pos moderno. Tenía que permanecer en su lugar. La voluntad de Dios para el peor era que fuera peón y para el señor fuera señor. Durante la revolución (siglo XVIII). Empieza la democracia. Pienso luego existo. La ilustración fue, predominante, la era de la razón. La mente humana era el punto de partida indudable para todo conocimiento. La ilustración o pegaba dentro de un esquema sujeto-objeto. La naturaleza dejó de ser “creación” y servir como maestro a las personas, para convertirse en objeto de su investigación. Desde una variedad de perspectivas: como seres pensantes (filosofía), como seres sociales (sociología), como ser religiosos (estudios religiosos), como seres físicos (biología, fisiología, anatomía y otras similares), como seres culturales (antropología cultural) y así sucesivamente.

Una tercera característica de la ilustración: la eliminación del concepto de propósito. Crea en la causalidad animada y consideraba al prójimo como una categoría de explicación en la física. Cuarto elemento de la ilustración: su creencia en el progreso. Lo opuesto al modernismo se denominó retraso, una comisión que los pueblos “subdesarrollados”. Y esta es la quinta característica de la ilustración. El conocimiento científico es fáctico, sin valores y neutra. Bertrand Russell (1970: 75) “es un hecho, y este hecho…de ninguna manera involucra la mente de una persona que tiene la creencia”. Al otro extremo de los hechos están los valores, basados no del conocimiento sino en la opinión, en la creencia. La religión está involucrada en este contexto pronto en sexto lugar, el paradigma de la ilustración todo los problemas, en principio, podrían resolverse.”Paula era oscura de la especulación teológica, metafísica y filosófica para surgir en el triunfo de las ciencias positivas” “las invenciones en el pasado eran pocas, raras, eran excepcionales y maravillosas” hoy son “muchas, frecuentes planeadas y que además dadas por sentado”. Finalmente la ilustración consideró al ser humano como un incluido emancipado y autónomo. Martín Lutero y Agustín. Un primordialmente relación con Dios y con la Iglesia. Ahora los individuos llegaron a revestir importancia e interés por sí mismos y para ellos mismos. Tendencia hacia la libertad indiscriminada “no hay absolutos; la libertad es absoluta”. Proviene de la ilustración y que considera a los seres humanos como individuos autónomos, sin ninguna referencia sobrenatural.

La ilustración y la fe cristiana.

La característica predominante de la era moderna en su autoprocentrismo radical. Su filosofía publicada es atea. La fe cristiana se le cuestiona severamente, será repudia con el desdén y se la ignora intencionalmente. Surgió una nueva disciplina teológica: la apologética cristiana. Debido a que la maldad no gozaba de ningún poder inherente sobre las personas, esas harían “naturalmente” el bien si se les permitía escoger pronto primero, la razón se convirtió en algo supermanente importante en la teología cristiana. Freud declaró que la religión no era nada más que una ilusión. Marx la abrió como algo malévolo, “el opio del pueblo”.otro sugirió que cada comunidad religiosa en realidad sólo se rendía culto asimismo. Los seres humanos han llegado a la madurez y no necesitan de Dios. Por eso la religión paulatinamente languidecía. La Iglesia y la teología respondieron a este desafío en diferentes maneras. La primera muestra fue divorciar la religión de la razón, sentimiento y experiencia humanos. Una segunda respuesta consideró la privatización de la religión. Una tercera respuesta fue la de declarar a la teología misma una ciencia. Una cuarta respuesta fue el esfuerzo de la religión por establecer su hegemonía creando una “sociedad cristiana”. Una última respuesta al desafío de supremacía de la razón fue abrazar a la sociedad secular.

Para la mayoría de los teólogos el interés en esto estaba subordinado a sus preocupaciones teológicas. La eliminación del propósito de la ciencia era reemplazada el propósito por la casualidad directa. La teología serbio igualmente influenciada por la distinción hecha por la ilustración entre hechos y valores. El cristianismo se redujo a una sola provincia en el vasto interno de la religión. Una reacción fue la de collar el paradigma de la ilustración poniéndolo al revés: la fe cristiana pertenecía a la categoría de “hechos” y no de “valores””si la ciencia natural se ocupa de los hechos y de la ley de la naturaleza, la teología se ocupa de los hechos y los principios de la Biblia”. “La Biblia…es un depósito de hechos”. Otra respuesta frente a la dicotomía entre hechos y valores estaba, en un sentido, exactamente en oposición a la anterior, pero también se basaba en suposiciones de la ilustración. En este caso, el creyente tenía que ver más con valores que con hechos. La idea de luxación de que todo el problema en principio tiene solución exención efecto igualmente importante sobre la teología y la Iglesia. Mesthene admite que la tecnología puede destruir “algunos valores” y que esto es “perturbador” porque “complica el mundo”.

El último precepto de la ilustración que hemos identificado era que todos son individuos hemos disipados y autónomos. Al explorar el impacto del paradigma de la ilustración sobre la vida humana en general, y no sólo sobre la vida religiosa, S. importa. Supuestamente la ilustración crearía un mundo donde recibía la igualdad entre las personas. No sucedió así.
La visión dista el espejo de la ilustración.

Iglesia y estado.

Fue inevitable que la ilustración influyera tan profundamente en el pensamiento y la práctica de la misión. Toda empresa misionera moderna fue hija de la ilustración. Intentaremos ahora a rastrear las maneras en que la idea misionera se ha desarrollado en el protestantismo a partir del siglo XVIII. Intentaremos identificar y delinear los eventos más importantes de este periodo que han afectado la evolución de la idea misionera. El paradigma de la ilustración dio cada vez menos viable la alianza entre la Iglesia y estado.

Las fuerzas de renovación.

En este acontecimiento convencieron tres factores para efectuar un cambio espiritual en el mundo angloparlante. Éstos fueron el gran avivamiento en las colonias de América del Norte, el nacimiento del metodismo y el despertar evangélico dentro del anglicanismo.

El segundo avivamiento.

Las iglesias del statu quo habían alcanzado su nariz al con la generación revolucionaria. El nuevo ambiente dio a la luz un espíritu misionero. El famoso lema de carey: “¡espera grandes cosas de Dios, intenta grandes cosas para Dios!”. “Cuán arrogante y escandalosamente las pobres razas negras fueron… Tratados durante siglos por personas que se consideraban cristianas”.

El siglo XIX.

Veían a las personas primordialmente como individuos, capaces de tomar decisiones por sí solas. Cada vez menos tensión entre trabajar para el reino de Dios y para el imperio al mismo tiempo. “No se ha podido descubrir ni un solo sermón o informe misionero que no subraye consideraciones escatológicas”.

Y para la cuarta década del siglo 19 el impacto del segundo gran avivamiento se estaban desvaneciendo. En los Estados Unidos del siglo XIX, el cristianismo de una religión del orden establecido.

El siglo XX.

Para la primera década del siglo XX se había completado la transición del posmilenarismore formado al en evangelio social. La guerra civil, sin embargo, en principio destruyó la creencia de que uno podía hacer evangelista y abolicionista a la vez.

Énfasis misioneros centrales en la época de la ilustración.

En este periodo operaban fuerzas centrífugas. Un esquema y en unificado y coherente de pensamiento y acción en esta época sería imposible y hasta sin sentido.

La gloria de Dios.

La soberanía de Dios sobre todas las cosas, y en la convicción de que Dios y sólo Dios podrían tomar la iniciativa en salvadas personas. Dios es quien perdona y salva, no los seres humanos.
¿”El amor de Cristo nos constriñen”?
En el despertar misionero el amor llegó a ser un incentivo poderoso: el amor con gratitud por el amor de Dios en Cristo. En conflicto con los conceptos dominantes de la época, los misioneros consideraban hermanos y hermanas a las personas a quienes se sentían enviados por Dios. El amor a Cristo y a la gente que se manifestó muchas veces en 1° amoroso de compromiso y dedicación. Inzendorf “donde quiera que allá la posteridad de hacer lo máximo para El Salvador ahí estaremos”. Aún así, se preside 1° mínimo de separación entre lo Soteriológico y lo humanitario durante el siglo XVIII y la primera parte del siglo XIX. La responsable del misionero de proclamar la salvación a individuos se convirtió en la marca de las misiones del siglo XIX. “Pasa a Macedonia y ayúdanos”. No nos sorprende que especialmente en el siglo XIX el adjetivo “pobre” se utilizaba de manera creciente como calificativo del sustantivo “pagano”. El amor se había deteriorado en la calidad condescendiente “el escenario de una guerra entre gratitud, cortesía y resentimientos”. Los cristianos del tercer mundo eran considerados menores de edad, bajo la tutela de los misioneros del mundo occidental.

El ángel y cultura.

“Se dieron el contexto de cuatro relaciones: la relación con el estado, con la cultura, con la discordia dentro de la Iglesia y con el dinero”. Durante los últimos siglos los cristianos en general no dura de lo más mínimo de la superioridad de su religión sobre todo las demás. La ilustración, sin embargo, juntamente con los avances científicos y tecnológicos que lo siguieron, colocó a occidente en la posición de ventaja, sin paralelo alguno, sobre el resto del mundo. “Chile Perú son estrechos territorios costeros, sin una cultura propia” “África se caracteriza por su sensualidad concentrada, lo inmediato de su voluntad, su flexibilidad absoluta y la incapacidad para el desarrollo”. “No es por accidente ciertamente que las naciones cristianas llegaron a ser portadoras de la cultura y liderazgos de la historia mundial”. “Suavizar sus costumbres, purificar sus relaciones interpersonales, adiestrando los rápidamente en los hábitos de la vida civilizada” “he venido para qué tengan vida, y para que la tienen en abundancia”.

El movimiento misionero contribuyó de manera determinante a la abolición de la esclavitud; difundió mejores métodos de agricultura; estableció mantuvo un sinnúmero de escuelas; proveyó cuidados médicos a millones; elevó el estatus de la mujer; creo vínculos entre las personas provenientes de países distintos, de ninguna guerra podía romper; eso no un segmento significativo del liderazgo de las naciones independizaras recientemente. La “teología occidental se trasmitió sin alteración alguna a las flamantes iglesias cristianas en otras partes del mundo, con ciertas concesiones, por supuesto. Las misiones protestantes buscaban establecer iglesias jóvenes “independientes”. La misión de Basilea fue excelente. Tanto liberales como conservadores compartían la convicción de que el cristianismo era la única base para una civilización sana. Así se veía el Evangelio primordialmente con un remedio para las enfermedades y miserias del mundo. No podemos ir al mundo no cristiano como si fuesen los diferentes de lo que somos, o con algo más de lo que tenemos. Aún cuando nos hemos esforzado al máximo para desenredar la verdad universal de su molde occidental… Sanos que no lo hemos logrado. En primer lugar, el ángel yo siempre llega a las personas con la vestimenta cultural. El segundo lugar, no tiene sentido negar que la cultura de los misioneros occidentales también ha contribuido de manera o si iba a otras sociedades. En tercer lugar, el Evangelio siempre llega a las personas y se percataron, a veces algo vagamente, de lo que algo andaba mal e hicieron todo lo posible para uno imponer esquemas occidentales sobre otros pueblos. Y otros persistieron en propagar la creación de comunidades cristianas autónomas en “el campo misionero”

La misión y él “destino manifiesto”.

La empresa misionera occidental del periodo bajo discusión procedía no sólo a partir del presupuesto de la superioridad de la cultura occidental sobre las demás culturas, sino también de la convicción de que Dios, en su divina Providencia, había escogido a la naciones de occidente, por sus cualidades singulares, como las abanderadas de su causa hasta los extremos de la tierra. El principio de la soberanía reside esencialmente en la nación: ningún cuerpo de hombres y ningún individuo pueden ejercer una autoridad que no emane expresamente de ella. Punto él AB, fundado en 1810, intentó reclutar para la causa misionera no sólo a “cristianos” sino también a personas calificadas como “patriotas”. En los primeros años del siglo XIX predominaba un sentido de “exclusividad estadounidense” “probablemente se trata del último pueblo peculiar que (Dios) pretende formar…antes de que los reinos de este mundo se asimilen al reino de Cristo”. Los cristianos que habitaban en la sobrepoblada costa oriental miraban hacia la región oeste más que hacia los países más allá de las fronteras. Estados Unidos no se unió a esta frenética carrera por conseguir colonias. Se volvieron demasiado orgullosos por haber evitado enredarse en el colonialismo”buen imperialismo espiritual proclamar el dominio de Cristo sobre las naciones “. El entusiasmo misionero llegó a un clima más con el Congreso misionero ecuménico de Nueva Cork en 1900 “el Congreso misionero más grande de la historia” 200 Sociedad misioneras y ¡casi 200,000 personas en las diferentes sesiones!. El presidente electo, William Mac Kinley, abrió el Congreso “tan maravillosos triunfos para la civilización”. Más en el siglo anterior los misioneros occidentales consideraron que las personas del tercer mundo eran inferiores a ellos y realmente indignas de que se les confiada el futuro de la Iglesia. Mirando hacia atrás a todo el fenómeno “destino manifiesto y la misión en Estados Unidos y otras partes, es necesario evitar deducciones simplistas. El impulso religioso y el nacionalista era fundamentalmente inseparables. Indudablemente sin embargo, el fenómeno analizado aquí debí a su misma existencia al espíritu de la ilustración.

Francisco Naves dijo...

Ser, hacer y decir 3.y 4

Salmos, sabiduría y misión integral.

Si hay una característica unificadora de estos libros de su carácter poético. Dios quiere amigos que entiendan lo que él hace, en vez de siervos que no lo comprendan (Juan 15. 15).

Salmos.

El libro los salmos tiene oración para pedir, para celebrar, para lavar, para meditar, etc..

Súplicas.

Es el grupo más grande del libro. El salmo 13 es un buen ejemplo.

Buscar a afectar lamentos de Dios.

1 aprendamos al optar por el estoicismo 2. Aprendamos a no tratar de mantener una cara falsa santidad frente Dios. Éstos salmos expresan el riesgo completo de las emociones humanas. Dios puede usar hasta las situaciones más espantosas para lograr sus propósitos (romanos 8. 28). Podemos usar el dio en la barriga de sentidos: 1. Ello como yo mismo 2. Ello como Cristo número… yo como mi vecino 4 de yo con mi enemigo.

Acciones de gracias.

Muchas de las súplicas incluyen un voto.

Los signos suelen tener los elementos: la invitación imperativa a la alabanza, y la alabanza misma. Solemos usar esos salmos en nuestros cultos, podemos también usarlos para enriquecer y revisar nuestras prácticas de alabanza en general. Dios cuida el mundo diariamente (salmo 104). La grandeza y la pequeñez del ser humano (salmo 8). El reino de Dios salmos (47, 93, 96-99).

Litúrgicos.

El grupo principal de los salmos litúrgicos tiene que ver con el rey humano (su coronación, su boda, su salida para la batalla, etc.). Primero hemos reconocido de éstos una dimensión histológica. Segundo, estos amos pueden ayudar a reflexionar sobre cómo vemos nosotros el mundo político.

Meditación.

En los salmos de meditación (o de sabiduría) la meta no es tanto llevar a cabo una de estas transacciones sino profundizar en el entendimiento de lo que está pasando, enfocando temas como la ley de Dios o la justicia. Primero, nos animan a reflexionar. Segundo, dudan un modelo de cómo llevar nuestras preguntas y dudas al corazón de nuestras oraciones. Pueden profundizar nuestra propia reflexión sobre la ley vivificante de Dios (1, 19, 119).

Conclusión.

Salmos tiene una trayectoria desde la petición (la queja) hasta la alabanza.

Proverbios.

Pide lo que quieras que yo te de (1R3.5) (Salomón) yo que ruego que le deja tu siervo discernimiento para gobernar a tu pueblo y para distinguir entre el bien y el mal (1R3. 9). En realidad proverbios tiene que ver más con los libros sobre la formación de ejecutivos (como los siete hábitos) que con los libros de filosofía. El prólogo (1. 1-7) define las metas pedagógicas del escrito, y también un modelo de cómo funciona: se trata de una lista sencilla con un principio familiar al fin. Nos desafía y apoya en cuanto a algunos temas clave:-la necesidad de la sabiduría-“justicia, juicio y equidad”-el temor de Yahvé. “Los sabios valoran el temor de Jehová; los insensatos desprecian la sabiduría y de enseña”. Como relacionarnos con la búsqueda humana de la sabiduría, la búsqueda de sociedades más humanas. Proverbios nos ofrece un modelo para una respuesta más adecuada, además dos retratos de nuestro mundo: el mundo según su naturaleza, y el mundo en contra de su naturaleza; el primero es creado por Dios.

En el campo del pobre hay abundante comida pero esta se pierde donde hay injusticia (13.23)”no respondas al necio según su necedad, O tu mismo pasarás por necio”, responde la lesión como se merece, para que no se tenga por sabio (Pr.26. 4-5). Inútil es el proverbio en la boca del necio como inútiles o las piernas de un tullido (26. 7)
El charlatán Pierre corra lengua como una espada, pero la lengua del sabio brinda alivio (12. 18). La lengua que brinda consuelo es árbol de vida; la lengua insidiosa deprime el espíritu (15. 4).

Proverbios puede ayudarnos a reconocer los costos probables y seleccionar las batallas que realmente vale la pena.

Job.

Entrar en la conversación entre Job y Dios puede nutrir una espiritualidad para este peregrinaje que es la vida. Satanás queda silenciado, pero Job no ha empezado todavía. No es lo mismo ver los toros desde la barrera. Él se atrinchera. Es pecador, pero no merece todo esto. La descripción de la experiencia los pobres que crean y mantienen la pobreza es tan poderosa como la de los profetas. ¿Dónde está Dios?
Después un intermedio de intención y calidad disputada (Eliú), aparece Dios. Siguen cuatro capítulos lleno de belleza y poder. Sin embargo, Dios testifica la que Job ha hablado con él con rectitud (42.8). El compromiso divino con la justicia existe dentro de este compromiso con la acción gratuita, y no viceversa. Si Job es evidencia, esto es precisamente lo que no debemos hacer. Dios restaura la prosperidad de Job. “No había en todo el país mujeres tan bellas como las hijas de Job. Quien les dejó una herencia, lo mismo que a sus hermanos” (42. 15). Ya al final del libro, Job refleja bien el carácter de su Dios.

Eclesiastés.

Eclesiastés es un libro raro, con la contribución muy importante para nosotros. Un rey notable de Jerusalén. Salomón. El patrón de sabiduría. Clama también por la justicia, y no la encuentra, ni de parte de los seres humanos ni de parte de Dios. “El agua para los bueyes y el vino para los reyes”. Por un lado Dios si juzga (7. 17; 11.9). Por otro lado, parece que el juicio no discrimina entre el justo y el malvado (3. 17-21). No seas demasiado justo, emisario en exceso; ¿por qué habrá de destruirte?; ¿por qué habrá de morir antes de tu tiempo? (7.16-17). La humildad reconoce que somos humanos, y no dioses. Sirve también para la misión integral cuando hay que nutrir coaliciones de grupos heterogéneos. Los placeres sensuales, las relaciones íntimas y la satisfacción en el trabajo deben recibirse como regalo de la mano de Dios (9. 17-10). En este mundo no es posible garantizar que los resultados de nuestro trabajo se han sostenibles (24) ¡la cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente! (4.9-12). El gozo en el trabajo depende de la solidaridad. Esta combinación de fe, humildad y anhelo, en espera de que Dios ha galgo nuevo, nos ayuda a seguir leyendo Eclesiastés. Este libro es una ayuda imprescindible en los contextos oscuros y ambiguos en los que nos encontramos hoy en día.

Cantares.

Tradicionalmente hemos leído estos poemas como una alegoría del amor entre Dios y su esposa (Israel, la Iglesia, el alma) y nada más. Este libro explora al amor entre Dios e Israel por medio de la metáfora del amor humano, y explora el amor humano a la luz de este amor entre Dios e Israel. Nos ofrece una visión de su restauración, y por eso puede animar y guiar nuestro peregrinaje rumbo a la integridad.

Hombre y mujer.

No su mundo es un mundo distorsionado por el dominio de los varones sobre las mujeres (Génesis 3. 16) “tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreara de ti”. Yo soy para mí amado: y su deseo tiende hacia mi (7. 10). La topografía de su cuerpo en la geografía de Israel. A la luz de los desafíos de la sensualidad, somos tentados a verla como una amenaza a nuestra vida comunitaria. Este libro nos ofrece una manera de ejercitar nuestra sensualidad para recolectarlos y abrirnos al descubrimiento constante. Se puede usar con parejas que están preparándose para el matrimonio, o en ministerios con parejas. Se ve la diferencia entre lo erótico y lo pornográfico.

La humanidad y la creación.

La tranquilidad y lo agreste sirve como el escenario para los amantes. (2. 10-13). Su despertar primaveral de vida, su fertilidad, refleja lo que está dentro de los amantes. Cantares, en otras palabras, es un modelo espiritual que abarca también nuestro encuentro con la tierra y nuestra mayordomía de ella.

La humanidad y Dios.

Las imágenes poéticas de encuentros entre amantes en cantares despiertan ecos de encuentros con el amante ¡cuán bella eres, amada mía, cuán bella eres! ¡Tus ojos son dos palomas! (1. 15) “por la noche sobre el hecho busco el amor de mi vida” (3. Uno). Aceptar la sensualidad y buscar transformar nuestras prácticas a la luz del Evangelio es difícil de imaginar. En cantares nos muestra porque vale la pena.

Conclusión.

“La gloria de Dios es la humanidad con plena vida, y la vida de la humanidad es la visión de Dios”.





Ser, hacer y decir 4.

Los profetas y la visión integral.

Los profetas clásicos del antiguo testamento, que proclamaron alternativas poderosas durante la época de la monarquía en Israel, se preocuparon por desmantelar estructuras injustas que reducían al ser humano a un objeto. Estos profetas vivieron y ejercieron sus “llamados” durante tres épocas cruciales de la historia del pueblo de Dios. En primer lugar, los profetas del siglo 8ª. C. se enfrentaron con la crisis de ser atacados por el gran imperio asirio. El siglo seis a. C. este pueblo sufre otra vez otra crisis existencial, los babilonios atacan el reino del sur, (Judá) encienden la ciudad, derriban por completo el templo. Todo esto fue anunciado por los profetas. El pueblo pierde su identidad, su tierra, etc. Años más tarde Esdras escribe cuando regresan unos 52,000 habitantes bajo el liderazgo del gobernador Zorobabel y del sacerdote Jesúa. En los siguientes años se levantaron varios profetas para animar y desafiar al pueblo quienes se desenvolvían entre sacerdotes y reyes. Algunos fueron “profetas falsos”, que sólo veían sus propios intereses.

El sacerdocio como institución en Israel.

Este servicio se efectuaba por los jefes de familia o de la tribu. En realidad el servicio nació en los tiempos de Moisés, y eran mediadores entre Dios y los seres humanos. Esto no tenían un llamado como los reyes o los profetas, normalmente eran heredados. Fue con Aarón que los sacerdotes se deberían separar del resto de la tribu, funcionaban como guardianes del santuario y servían como facilitadotes para los sacrificios y como intérpretes de los oráculos. Deberían ayudar a entender la torah y servían como educadores, días y velaban por bienestar del pueblo con el tiempo fueron perdiendo autoridad de respeto lo que dio lugar a los reyes y profetas.

La realeza como institución en Israel.

Durante muchos años el pueblo de Israel vivió bajo la institución de la realeza. Todo esto surgió por qué el pueblo exigió que el juez y el profeta Samuel les proveían un rey (Deuteronomio 17. 14-20). Los reyes no llegaron a cubrir la expectativa que Dios había pretendido. Muchos hicieron lo opuesto. Lo que originó una gran protesta e indignación por parte de los profetas llamados por Dios.

Los profetas como institución en Israel.

La persona en función del profeta fue creciendo y cambiando con el tiempo, aún que fueron llamados de diferentes formas.

Ro’eh
“vidente”, es decir operar más como a divinos (1S 9.9, 11). Es el caso que al profeta Samuel así le llamaron, sin embargo a Ezequiel no se lo caracteriza con ese término (Ez.20.1).

Jozeh.

“Vidente” fue con Amos Isaías y Miquedas que se uso este término.

Navi’.

Se fue con Jeremías que se usó este término. “Colocar la palabra en la boca del profeta”. Se identificaron dos tipos de discurso: 1. Ora ángulos divinos (Jeremías 15. 2-9). 2. Oráculos proféticos (Mi.3. 5-8). Con este término se distinguió a los profetas que eran muy creativos en su discurso.

Ish ha elohim.

“Hombre de Dios”, Elías y Eliseo “hombres santos”. Mundo de lo sagrado dentro de lo profano.

El contenido del mensaje Profético.

El pueblo debería de mantener un compromiso con Dios, pero una y otra vez había rechazado a Dios. Entonces el profeta hace un llamado urgente al arrepentimiento y una reconciliación genuina con Dios. El profeta trata varios temas el amor, la paciencia, la fe, la injusticia, el servicio de Dios, y la impunidad de los que tienen el poder.

Lo medular del mensaje profético.

El problema principal.

El profeta llamado por Dios porque existe un problema grave en la sociedad de Israel. Numeró uno discernir cuáles eran los problemas. La presencia de un liderazgo corrupto, que no cumplen con sus responsabilidades, corrupción e insensibilidad de los líderes del pueblo, Ezequiel 22.25, 26, 27, 29.El profeta de la injusticia, la corrupción, y la denuncia. El profeta es implacable.

Una propuesta de solución.

Practicar la justicia, amar la fidelidad y caminar en humildad (Miqueas seis. Ocho). El amor a Dios y el amor al prójimo. “Pero decidí actuar en honor a mi nombre” (Ezequiel 20. 14). Dios se ve en la obligación de defender su santo nombre (Ezequiel 36. 20). Hace un llamado en primer lugar a practicar la justicia. Natán es el ejemplo del agachón (2S12); Dios tampoco acepta pasivamente que Acab y Jesabel se hayan apropiado de la propiedad de Nabot (1 Reyes 21). Dios es un enamorado de la justicia.

En segundo lugar. Dios espera que el hombre han en la fidelidad (jesed) (óseas 6. 6) amar su prójimo como se ama asimismo (Lucas 10. 27). El desafío para el ser humano es discernir de qué manera Dios fue solidario, para luego invitarlas en la comunidad humana. El tercer eje del marco teórico ofrecido por el profeta Miqueas es el de caminar humildemente ante Dios. “Humíllate ante Dios”. Existía una intensa preocupación de los profetas por el shalom de sus contemporáneos.

Isaías.

Denunciar las injusticias que sufrían los más débiles de la sociedad (Isaías 10. 1-3). Una visión integral ejercida hoy deberá tomar muy en cuenta el ejemplo de Isaías. Dejar de pecar con impunidad, estaba entre tejido con el llamado a buscar la justicia, a cuidar a huérfanos, a defender a la viuda y a proteger al más débil.

Jeremías.

Vio a su pueblo derrotado y llevado como esclavo a Babilonia. Él se identificaba plenamente con el pueblo, denunció al liderazgo que tenía el poder, y hace un análisis de sus consecuencias. Confronta a los poderosos por su falta de ética, de justicia y de compasión por los más débiles. Enseña que hay una relación directa entre la realidad espiritual y la opresión ideológica y material de los poderosos. El profeta tiene pasión por la vida, y por esta dispuesto a arriesgar su vida. Le dice directamente al rey Joacim que el conocimiento de Dios es sinónimo de hacer justicia a los pobres.. Proclamó que era muy importante “conocer a Dios” (práctica la justicia, amar jesed, y caminar en humildad con Dios) (Miqueas).

A modo de conclusión.

Para su continente latinoamericano no habrá esperanza a menos que la comunidad cristiana entienda que su mensaje debe considerar la totalidad de lo humano y ser productora de camino de esperanza.

Francisco Naves dijo...

Ser, hacer y decir 2.

La misión integral de los libros históricos del antiguo testamento.

Nos encontramos con algunos males el de neuróticos endémicos-como la lectura legalista de la Biblia-que tanto mal ha hecho a la interpretación en general.

El pueblo cristiano prefiere que las conclusiones surjan de la la misma, ya que considera que ella es la fuente de autoridad. Propondremos, básicamente, una lectura no legalista de los textos y una búsqueda de argumentos y contenidos que surjan de la misma escritura. Los libros históricos de que su contenido y buscaremos las enseñanzas sobre la visión integral pertinentes para hoy. Distribuiremos el contenido los libros históricos en tres secciones: el periodo la formación y establecimiento de la comunidad alternativa de Yavé, el período de la claudicación del proyecto de comunidad alternativa (la monarquía), y el periodo de los intentos de recuperación en restauración de la comunidad alternativa.

1. El periodo de formación y establecimiento de la comunidad alternativa de llave.

El contenido del libro de Deuteronomio, las palabras ha llevado el relato de los acontecimientos hasta las puertas de la tierra prometida. Los hechos fundamentales de la comunidad de Yavé ya han sucedido. Han sido liberados de Egipto. Han sido forjados en la experiencia del desierto. Moisés ha muerto. Josué es el sucesor. Recibieron instrucción (Torah). Ya recibieron los principios del servicio integral. Ha llegado el momento de introducirse en la tierra prometida y establecerse ahí. Falta llevar a cabo los objetivos, a través del liderazgo operativo. La cuestión es la interpretación teológica de la existencia de procedimientos violentos-de la muerte-para alcanzar la meta de establecer la comunidad alternativa en la tierra prometida. No es fácil encontrar una respuesta para resolver este tema. En el territorio, permanezca en comunión con el, y se rija por Torah. En éxodo de 23. 20-33se describe el procedimiento que el señor indica utilizar para tomar posesión de la tierra “los desalojaré poco a poco, hasta que Seas lo bastante fuerte para tomar posesión de la tierra”.

1. La centralidad de la torah en el establecimiento de la comunidad alternativa de Yavé en el libro de Josué.

El libro de Josué se simple vista sumisión. El establecimiento físico de la comunidad alternativa: ser el líder operativo de parte de Yavé para lograr este objetivo puntualmente. En éstas instrucciones se destacan: a. El coraje que se necesita para emprender semejante tarea. b. La estricta necesidad de depender del código de la alianza la torah, la instrucción que el siervo de Dios, Moisés, le mandó. c. El respaldo de Dios con su presencia.
Todos escucharon lo que estaba escrito en la torah. Finaliza dando preceptos y normas que registró en el libro de la ley de Dios (v.25). “La invisibilidad del señor para gobernar se transforma en visibilidad a través de su código de conducta y procedimientos, la torah).

2 ¿violencia o no violencia en establecimiento de la comunidad alternativa de Yavé?
Organiza y realiza su estrategia operativa con gran éxito. Desde el capítulo seis en adelante se relata la, como van ganando territorio y estableciéndose en Palestina. En estas páginas bíblicas se encuentran aparentes contradicciones entre lo que parece indicar el señor en un lugar en la escritura-“no matarás”-y lo que en otros lugares presenta a Dios como indicando a Josué y al pueblo que vayan y maten. Podría el autor esclarecer el tema desde la arista de las cuestiones gramaticales del idioma hebreo. Por otro lado la hermenéutica, se interpretan todos los sucesos como atribuidos a Dios, sean o no voluntad de él “si sucede, es porque Dios lo permite”. Si leemos 6. 2-5 en ningún momento se menciona la indicación de realizar la matanza. En la renovación del pacto con el pueblo de Israel en Siquén se menciona: no por ustedes quienes, con sus espadas y arcos, derrotaron a los dos reyes amorreos; fui yo quien por causa de ustedes envíe tábaros, para que expulsaron de la tierra a sus enemigos (v.26. 12). En estas palabras se reconoce que el procedimiento no violento es el que agrada al señor.

3. La organización ministerial en el establecimiento de la comunidad alternativa de Yavé en el libro de Josué.

El término que se traduce como “jefes” es zaquen conocido comúnmente como “ancianos”. El segundo término que se utiliza para oficiales es shatary. El tercer término es shoptayu, y está asociado con el sentido de administrar justicia. En 22. 30, la palabra es nesyay, y tiene la connotación de una persona que es levantada por la comunidad para gobernar.
4. La organización ministerial en el establecimiento de la comunidad alternativa de llave en el libro de jueces.
El libro de los jueces abarca unos 200 años. Los pueblos cananeos se caracterizaban por seis ciudades-estado más o menos independientes unas de otras.
La tienda de reunión, el tabernáculo, que en el santuario, no permanecía en un solo sitio sino que era portátil itinerante. La organización estaba descentralizada. Éstos textos muestran una invitación pluralizada y distribuida.

5. La centralidad de la torah y la relación con Yavé en el establecimiento y la continuidad de la comunidad alternativa de Dios en el libro de jueces.

En 2. Siete, 10 “el pueblo sirvió al señor mientras vivieron Josué y los ancianos que le sobrevivieron, los cuales habían visto las grandes obras del que él señor había hecho por Israel” “también murió toda aquella generación, y surgió otra que no conocí al Sr. ni sabía lo que él había hecho por Israel”. El drama humano es no entender que existe “otra realidad posible”. Se necesita la creatividad que sólo el espíritu hace posible. Se necesita la confianza en Dios. La comunidad alternativa es posible en Dios.
6 la función de liderazgo operativo en el establecimiento de la comunidad alternativa de Dios en el libro de jueces.
Según jueces 2.18”cada vez que señor levantaba entre ellos un caudillo, estaba con él. Mientras el caudillo vivía, lo libraba del poder de sus enemigos, porque el señor se compadecía de ellos al oír gemir por causa de quienes los oprimía y afligían”. Dios desea la fidelidad a él, el cumplimiento del pacto y la sujeción a su palabra. La dinámica es igual sigue el mismo proceso:1 el pueblo se aparta de Dios. 2 aparecerá supresores y los problemas. 3 el pueblo clama de angustia o clama pidiendo ayuda al señor. 4. El señor hace surgir los libertadores. 5 se produce la liberación. No los seis en el transcurso del tiempo aparece el olvido. ¡A empezar de nuevo!. Otoniel le dio paz y tranquilidad al país por 40 años. El caudillo Aod, mediante su accionar, le dio tranquilidad al pueblo durante 80 años.

7. Responsabilidad virtual y comunitaria ante Dios y la común alternativa de Dios en el libro de jueces.

Jueces 17. 6 y 21. 25”en aquella época no había rey en Israel; cada uno hacía lo que le parecía mejor”. Se puede interpretar que la monarquía sería mejor, pero la monarquía nunca fue lo que quiso Dios. El paradigma de las tribus partía de las siguientes características: 1. Era una especie de federación nacional y religiosa que fue ganando en cohesión. 2 existían santuarios de Dios y, con ellos un sacerdocio de Dios. 3 hubo en ese tiempo figuras carismáticas salvadoras. 4 las tribus fueron cohesionadas en el plano religioso mediante la fe en Dios. 5 la fe en Dios constituyó la base para la comprensión de Israel como pueblo de Dios.

Dos el periodo de claudicación del proyecto de la comunidad alternativa de Dios.
Samuel es dedicado por su madre, Ana, y se incorpora al santuario que estaba en silo.

1 Samuel 7.6indica que comenzó a gobernar shapat, ( 1 Samuel 7. 15-17) dice que Samuel siguió gobernando a Israel de toda su vida. La crisis sobrevino en la aparición de la corrupción los avisadores de las cosas del señor y produjo la ruptura del paradigma.

1. La decisión de abandonar el paradigma de la comunidad alternativa de Dios y optar por el paradigma monárquico de los polos cananeos.

Los que administraban la casa del señor se permitieron: ninguno de sus hijos y yo el ejemplo de su padre, se dejamos guiar por la avaricia, aceptando sobornos y permitiendo la justicia (primera de Samuel 8. Tres) 1 Samuel 8. 4-5 “por esa reunión los ancianos de Israel y fueron la rama para hablar con Samuel. Le dijeron: tú has envejecido ya, sus hijos no siguen por ejemplo, mejor danos un rey que nos gobierne, como lo tienen todo naciones”. Parece que a esta instancia los ancianos de Israel lo espera la solución del señor y lo deciden por ellos mismos. Depositan su confianza en el ser humano y no en Dios. “El hombre renuncia al poder divino para poner su confianza en el humano, cayendo esta forma en la isla del día. Ha sustituido a Dios por otra realidad distinta, absolutizándola”. Es el señor el que se encuentra diciendo a Samuel: “en realidad, no te han rechazado aquí, sino a mi, pues no quieren que yo reine sobre ellos. Están tratando de no modo que me han tratado a mí desde el día en que los saqué de Egipto hasta hoy. Me han abandonado para servir a otros dioses” (primera de Samuel 8. 7b-8). Es aquí donde el pueblo de Israel fracasa como pueblo Dios. Los profetas combatieron, según Sicre, básicamente tres elementos: 1 el culto a la propia sabiduría política. 2. El culto al poderío militar. 3. El culto a los grandes imperios.

Claudicación de la comunidad alternativa de Dios en pro de un proyecto de poder, de una estructura social, política, económica y espiritual que no lo tienen como su centro. “Adviérteles claramente del poder que arriba a ejercer sobre ellos” (1S8.9) y ustedes mismos servirán como esclavos. La descripción de la formación de la monarquía se descree asciende por 1. La formación de la estructura bélica. 2. La utilización de las mujeres en la logística. 3. La confiscación de bienes inmuebles para mantener la corte.duro cuatro. La imposición de los impuestos para mantener esa corte unto 5 la confiscación de los mejores empleados y bienes muebles. 6 finalmente, la opresión esclavitud de todos.

En veces de ser esclavizados por países ajenos, van a pasar hacer esclavizados desde dentro.
2 abandonó del paradigma de la comunidad alternativa de dioses, el establecimiento del paradigma monárquico de los polos cananeos.

Su consolidación con David y Salomón su colapso definitivo que termina con el pueblo exiliado en Babilonia “paradigma davico (mateó 22. 42-45). Saúl, como muchos otros reyes, fue un fracaso. Saúl y todos los israelitas contentos. ¿Y el señor?.

David como los reyes de canaán: uno. Recibió entrenamiento Guerrero y aprende el arte de producir el y aro mediante su contacto con los filisteos. Dos. Formó su propio grupo de mercenarios. Duró tres buscó un lugar estratégico para establecer su ciudad estado. 4 centralizó la vida social, religioso y espiritual de Jerusalén al caer en la 5. Redujo la práctica de la religiosidad y la espiritualidad a lo único. Natán está tan comprometido en las intrigas palaciegas,, cuando tiene que reprender a David le cuenta un cuento.
Salomón. Se preocupó por su programa que incluye: 1 un harén. 2 un sistema tributario. 3 una complicada burocracia. 4 un ejército permanente. 5 una verdadera fascinación por la sabiduría. En el libro de los Reyes, se encuentra la descripción de la opulencia de Salomón.

Además de casarse con la hija del faraón él tuvo amoríos con muchas mujeres moabitas armónitas, etc. Todas ellas mujeres extranjeras. El señor había dicho: “no se unan a ellos, ni es a ustedes, porque de seguro les desviara el corazón para que sigan otros dioses”. Tuvo 700 esposas y 300 concubinas. Todas estas mujeres hicieron que se permitiera su corazón, siguió a otros dioses, y no siempre fue fiel al señor su Dios.
Duro tres fracturas y desaparición del paradigma monárquico.

El capítulo 12 de 1 Reyes se describe cómo se dividió el reino por falta de sabiduría que tuvo Roboán, al aumentar la opresión sobre el pueblo. Básicamente, la función de los profetas es “hervir” con pasión ante la deplorable situación del pueblo, y proclamar la palabra del señor en la fuerza del espíritu. En los dos reyes se destacan dos reyes primero Ezequías que por consejo del profeta Isaías llama al pueblo al arrepentimiento y Jerusalén cesaran. Josías efectúo el proceso de restauración de las de por parte de la reconstrucción del templo, se encontró libro de la ley: 1 la Tora2 la exterminación de cultos extraños y extranjeras. 3 quita el sincretismo, ni antes ni después de Josías hubo otro rey que se volviera al señor.finalmente el pueblo se apartó del señor y fue destruida Jerusalén. Fue exiliado a Babilonia.

13 el periodo de los intentos de recuperación está oración de la comunidad alternativa de Dios.

Existe un gran vacío, no parece los detalles de la vida del pueblo en el exilio babilónico. Este es un yodo muy duro para él pueblo de Israel. La conocida diáspora del pueblo de Israel comienza con la Aídaa de Babilonia, y desde entonces hasta ahora Israel vive la tensión entre patria y diáspora.
1 inclusión o exclusión de la comunidad alternativa de Dios, en el periodo de los intentos de recuperación y restauración.
Rock: inclusión.

El libro de Ruth. Establecimiento de la comunidad alternativa de Dios. Rock es moabita. Moab, como persona, es el hijo resultante de la relación sexual de los con su hija mayor(Génesis 19. 37). Es este pueblo quien quiere maldecir al pueblo de Israel a través de balaam.

Ruth1. 16-17sintetiza esa vivencia profundamente afectiva y emocional ( el gran amor que la unía a su suegra Noemí) su pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios. En la comunidad alternativa de Dios debe haber espacio para todos.

Esdras y Nehemias: exclusión.
Cuando Esdras que su pueblo práctica las costumbres de los cananeos, se horroriza, cerrar las vestiduras, se arranca los pelos y se arroja al piso muy angustiado (Esdras 9. Tres). Deciden expulsar a toda las mujeres Cananea y a todos los hijos de matrimonios mixtos. Así culmina el libro de Esdras. En Nehemias encontramos expresiones similares.
2. La centralidad del templo y la torah en el periodo de los intentos de recuperación y restauración de la comunidad alternativa de Dios en el libro de esas.

El libro de esta nos introduce a la historia posexilica y la intención de las familias judías de reconstruir el templo. Esdras es considerado como el fundador del judaísmo primitivo. Esto devino en un paradigma tal legalista y cerrado como en los fariseos en el do testamento. De un extremo se fueron al otro.

3 el cepo de la conciencia-mentalidad esclava en el periodo los intentos de recuperación y restauración de la comunidad alternativa de Dios en el libro de Esdras. (8. 22) aunque somos esclavos, no los has abandonado. Reedificar tu templo y reparar sus ruinas, y los has brindado tu protección en Judá y Jerusalén (9. 9).

4 la defensa de los pobres en el pedido de los intentos de recuperación está oración de la comunidad alternativa de Dios en el libro de Nehemías.

Este comienza planteando la situación humillante y cada amistosa, se propone reconstruir las murallas de la ciudad santa. Su gran sabiduría como líder operativo para organizar el trabajo y la gente . Cuando escuche sus palabras de protesta, me enoje muchísimo (5. 1-6). Y lo que es peor: la opresión, la usura y la explotación de su pobreza realizadas por los mismos integrantes de la comunidad judía. Ordena devolver todo lo que han robado y estafado. Decrete una exención de impuestos y explica sus motivaciones.
5. La centralidad de la torah en el periodo de los intentos de recuperación restauración de la comunidad alternativa ya me en el libro de Nehemías. Durante tres horas leyeron el libro de la ley del señor su Dios, y las tres horas siguientes le confesaron sus pecados y lo adoraron (Neh9.1-3). Se buscó a cerrarse a su identidad nacional y no a su relación con Dios.
Conclusiones.

1. Dios quiere formar y establecer la comunidad alternativa.

¡Vaya misión integral! Nada más integral e inclusive hubo que la construcción de la comunidad alternativa del señor. La cuestión clave es construirla juntos, con el señor como compañero.

2. La palabra de Dios, el señor, de ocupar el lugar central en la formación establecimiento de la comunidad alternativa. Percibir esto no es fácil, pero es posible.

Duró tres la organización de las comunidades alternativas y la manera en que se ejerza el poder determina si verdaderamente es la comunidad del señor o no.

Un solo ser humano en lugar de Dios, y eso no es posible. ¡Pobre humano serrano nación ¡pobre comunidad! El único señor y amo, el único que debe dominar es Dios, Jesucristo en el caso de no testamento. Todos estamos para servir y no para ser servidos. En este sentido es claro el no testamento en Marcos 10. 35-45 y Mateo logró 20. 20-28.

3. La manera en que se construirá comunidad alternativa de Dios, el señor, es servir a los demás.

Tener la paciencia para esperar los tiempos correctos y, cuando lleguen las oportunidades, actuar con firmeza y coraje. La comunidad alternativa es posible sólo en Dios.